Maria Rial. issisora
Miembro Conocido
.
A la Luz de mis ojos.
Voz del corazón...
Una
e t e r n a
p r i m a v e r a.
Dos ríos, hoy por ti,
mis manos desnudas
que se convierten en flores
vida, pasión, fuego y sentimiento,
y el anhelo que levanta el telón de mis parpados...
para que mire el cielo, cuando me despierta tu sonrisa
dúctil y melodiosa.
S i l e n t e s
tus ojos,
mis manos.
Desnudos
ríos
de
amor
n a c e n
de mí, para ti.
¡El Sol vivo de mis días!
Y nuestros corazones, agradecidos
se elevan, abrazan, reciben, viven.
E n a m o r a d o s
latiendo al unísono.
Aire, éter luminoso,
agua, viento y brisa
b e s a n d o mi
humanidad.
La
g o t a
exuberante
del creador
f l o t a,
como
¡Océano de vida!
e n c i e n d e
su gema
destilada.
¡Oh, tierra mía!
¿De dónde brota tanto amor?
¿De quién es, el rocío de esta lágrima diamantina?
¡El verbo que se desliza juguetón sobre mi boca!
y mis labios con su sonrisa se evaporan en dulzura.
¿Quién es el cálido alimento de nuestro corazón?
¿Quién corona de besos la luz de mi mirada?
Versos
dos besos
cielo y tierra,
torrenciales cascadas
cuando juntos fluimos
y se c r i s t a l i z a
el amor
frente a los ojos
ll o v i z n a de t e r n u r a,
rostro impregnado de luz.
¡Oh! piel de é x t a s i s
y
la
paz
en tu
regazo
mientras
caudalosos
siguen mis ríos
coloreando de canela
la miel de mis versos.
Recorriéndote,
bañándote
la vida,
que
como
alfombra de dulzura
tu cariño la posa en mi camino.
Entregándome, con tu abrazo cálido,
la generosidad del sol amante...
b r o t a n d o.
Selva y riqueza, vida,
la exuberante bondad del cielo.
Nuestro hogar, anidado a una estrella,
en millones de estrellas se pende un infinito.
Vigilantes de este fastuoso recorrido del amor.
Algunos luceros... se hacen cómplices
de
nuestro
Universo.
El
anhelo
del alma
llega a ti.
La pasión desnuda,
de un espacio
abierto
de
D i o s.
M a j e s t u o s a
s i n f o n í a,
creación
donde
tú eres.
El instante precioso
de un ángel que despierta,
el suspiro de un latido intacto…
El amor, que se prende entre mis brazos
como luciérnaga encendida
es la hoguera
tropical
de
mi
gran
c o r a z ó n,
en eterna primavera.
ALEGRIA
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