Maria Rial. issisora
Miembro Conocido
AMOR
ven prende la luz...
¡VIDA!
Balance
cielo e infierno
hablan de luchas
infiernos contra cielos.
¡¡DIOS!!
¿Estás aquí?
Donde, dónde, amor que no te veo.
Ven, ven...dicen que nos protejas de los demonios
... ¡Demonios! si en ese mundo, hasta los ángeles,
lanzan a la calle, sin clemencia a otro ángel bueno.
... ¡Cielos! amor - odio
perdón, como que falta más luz,
que ya ni se puede distinguir la siembra...
CIELO e INFIERNO...
ciego, ciego.
¿Será porque los ángeles se casan?
y responde la sabiduría...
¡Maestro!
creo que quiso decir, se cansan.
Sí, claro créalo... créalo, que también se cansan
y a veces hasta por amor pierden, las plumas y sus alas.
Umm, amor hay C L AMORRR...
Digo al Cielo y al infierno
dejen las luchas YA silencio, silencio...
Será que hay aquí
AMOR, AMOR
suficiente espacio
para albergar a un ángel bueno.
¡R e l á m p a g o s!
de repente retumba, un eco mas allá del horizonte
y se escucha una voz, o r g u l l o s a diciendo bienvenidos,
por supuesto que hay puesto para el amor,
y de inmediato una estrellita titila
¡ay! estrellita corre, corre, ve, comienza a buscar...
Será mentira... será verdad,
baja, sube, busca hasta la saciedad,
llega, salta, entra, sale y vuelta a volar.
La voz de humildad sin habla…
Solo observa y piensa mmm,
aqui por este desierto, llora hasta el mar muerto.
M i e n t r a s
aparece a vuelo lento, muy lento...
Un ave, desde las alturas,
plácidamente planea
hasta lograr un bajo vuelo
bajo, bien bajito...
¡Vaya milagrosa precisión!
con la logra distinguir a un precioso
ángel bebecito,
que como un pichoncito, de miedo tiritaba
porque no podía abrir sus alas y salir volando
para no ser aprisionado, entre las garras de un fiero varón...
¡Ay! perdón dijo al maestro, digo león aaa.
Con sus plumas el ave sobre el ángel bebecito, se posa,
lo cubre de amor,
le ayuda a salir de ese falso... terror.
Pero de tanta batalla, las alas del ave,
sin plumas de amor, también se quedaban.
Entonces le sorprendió escuchar
al bebecito susurrando
despacito
muy d e s p a c i t o
¡DIOS, POR FAVOR PRENDE LA LUZ DEL AMOR!
¡Tú sabes que sin amor, no se ve nada!
y triste es ver, un ave de las alturas por amor,
en el suelo, sin plumas en sus alas.
Con ese sentir melancólico poesía,
hizo llegar ese susurro divino, al amor del alto cielo...
El cielo envió, un halcón con alas majestuosas,
plumas doradas para buscar todo el amor de su preciosa amada
Juntos se elevaron...
pero antes de partir de ese pequeñito espacio.
El ave de gratitud sonrió, y se encendió la luz de sus ojos,
al ver feliz, al bebecito que abrazado al regazo del corazón de la amada
ya disfrutaba nuevamente del amor
con sus elegantes alas y el oro de las plumas de sus labios
seguía besando la luz e s m e r a l d a
de estos mis ojos, en tus ojos...
DISUELTAS
las luchas...
entre cielo e infierno.
¡Aleluya! ¡Aleluya!...
Poesía y la amada luz, de un ángel adorado....
Hoy celebran con alegría la vuelta del amor amor,
danzando en la radiante armonía de este jardín amado.
ven prende la luz...
¡VIDA!
Balance
cielo e infierno
hablan de luchas
infiernos contra cielos.
¡¡DIOS!!
¿Estás aquí?
Donde, dónde, amor que no te veo.
Ven, ven...dicen que nos protejas de los demonios
... ¡Demonios! si en ese mundo, hasta los ángeles,
lanzan a la calle, sin clemencia a otro ángel bueno.
... ¡Cielos! amor - odio
perdón, como que falta más luz,
que ya ni se puede distinguir la siembra...
CIELO e INFIERNO...
ciego, ciego.
¿Será porque los ángeles se casan?
y responde la sabiduría...
¡Maestro!
creo que quiso decir, se cansan.
Sí, claro créalo... créalo, que también se cansan
y a veces hasta por amor pierden, las plumas y sus alas.
Umm, amor hay C L AMORRR...
Digo al Cielo y al infierno
dejen las luchas YA silencio, silencio...
Será que hay aquí
AMOR, AMOR
suficiente espacio
para albergar a un ángel bueno.
¡R e l á m p a g o s!
de repente retumba, un eco mas allá del horizonte
y se escucha una voz, o r g u l l o s a diciendo bienvenidos,
por supuesto que hay puesto para el amor,
y de inmediato una estrellita titila
¡ay! estrellita corre, corre, ve, comienza a buscar...
Será mentira... será verdad,
baja, sube, busca hasta la saciedad,
llega, salta, entra, sale y vuelta a volar.
La voz de humildad sin habla…
Solo observa y piensa mmm,
aqui por este desierto, llora hasta el mar muerto.
M i e n t r a s
aparece a vuelo lento, muy lento...
Un ave, desde las alturas,
plácidamente planea
hasta lograr un bajo vuelo
bajo, bien bajito...
¡Vaya milagrosa precisión!
con la logra distinguir a un precioso
ángel bebecito,
que como un pichoncito, de miedo tiritaba
porque no podía abrir sus alas y salir volando
para no ser aprisionado, entre las garras de un fiero varón...
¡Ay! perdón dijo al maestro, digo león aaa.
Con sus plumas el ave sobre el ángel bebecito, se posa,
lo cubre de amor,
le ayuda a salir de ese falso... terror.
Pero de tanta batalla, las alas del ave,
sin plumas de amor, también se quedaban.
Entonces le sorprendió escuchar
al bebecito susurrando
despacito
muy d e s p a c i t o
¡DIOS, POR FAVOR PRENDE LA LUZ DEL AMOR!
¡Tú sabes que sin amor, no se ve nada!
y triste es ver, un ave de las alturas por amor,
en el suelo, sin plumas en sus alas.
Con ese sentir melancólico poesía,
hizo llegar ese susurro divino, al amor del alto cielo...
El cielo envió, un halcón con alas majestuosas,
plumas doradas para buscar todo el amor de su preciosa amada
Juntos se elevaron...
pero antes de partir de ese pequeñito espacio.
El ave de gratitud sonrió, y se encendió la luz de sus ojos,
al ver feliz, al bebecito que abrazado al regazo del corazón de la amada
ya disfrutaba nuevamente del amor
con sus elegantes alas y el oro de las plumas de sus labios
seguía besando la luz e s m e r a l d a
de estos mis ojos, en tus ojos...
DISUELTAS
las luchas...
entre cielo e infierno.
¡Aleluya! ¡Aleluya!...
Poesía y la amada luz, de un ángel adorado....
Hoy celebran con alegría la vuelta del amor amor,
danzando en la radiante armonía de este jardín amado.
María . Issisora
-17-
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