Azalea Diaz L
Miembro Activo
El camino lejano,
llega a mi puerta
y conquista el fulgor
de un beso relajado,
que se percibe
en la ausencia
de un día nublado.
Sediento de aromas,
de camisas de fuerza,
de premisas lejanas,
que tal vez no llegan,
pero que guardan recuerdos
de días de amores
grandes como soles,
llenos de fulgores.
Un cielo estrellado,
se queda callado,
en la morada de
un beso que se quedó postrado,
en la lira de un sueño,
en el baúl del silencio.
En la lejanía del horizonte,
en el preludio de un verso
que se quedó en el recuerdo.
de letras que llevan
tan dulces anhelos.
Azalea Díaz.
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