Antonio Jurado Rivera
Miembro Conocido
La noche fue ajetreada,
ella estaba aún dormida
y yo no quise hacer ruido
para que no despertara
y pudiera dormir bien.
Despacio abrí las cortinas,
me oyó y al abrir los ojos
la sala se iluminaba
lo mismo que cuando el alba
anuncia el amanecer.
Y es que esos ojos tan lindos
cuando se abren iluminan
con sus destellos la vida
y se vuelve todo oscuro
cuando los cierra otra vez.
Antonio Jurado (España)
© Derechos reservados