Victor Diaz Goris
Miembro Conocido
EL DOLOR DE LA INVOCACIÓN
Invoco tu nombre
como se invoca a una deidad
que cae en forma de relámpago
sobre el rostro adusto de un viernes
que primero fue sábado
y luego nostalgia.
Invoco tus manos
como se invoca un espejismo
sobre el cual cabalgan
miles de azules hormigas,
las cuales llevan,
adheridos a sus pasos,
miles de ojos de niños decapitados.
Invoco tu aroma
como si me ofrendara yo mismo
al agridulce sabor de un trueno equilátero,
en la fingida quietud de una larga oración de amor
que sabe bien que no será escuchada
ni por los ángeles ni por los demonios.
Invoco tu aliento
como se invoca la sacrosanta mentira de la angustia,
arrodillado silente
ante el venerado altar de la memoria de tus ojos,
donde mi alma sigue ardiendo,
a pesar del tiempo
y a pesar de nosotros.
Invoco tu alma
como se invocan las espinosas luces
de un himno gris lleno de hímenes de doncellas muertas,
prevalido de las todavía vivas antorchas
que han de incendiar la mañana
con la desmemoria de tus besos.
Invoco tu cuerpo
como se invoca vehemente la todopoderosa presencia
del olvido,
en esta acrisolada inquietud de no tenerte,
y en esta perenne orcotristeza*
que me ha dejado tu ausencia.
VÍCTOR DÍAZ GORIS
Orcotristeza*= Orco: (Del lat. orcus, ultratumba, y, por ext., Plutón, dios de la muerte y aun la muerte misma).
1. m. Según la Roma clásica, lugar, contrapuesto a la Tierra, adonde iban a parar los muertos.
2. m. poét. infierno (lugar que habitan los espíritus de los muertos).
Citado de: Real Academia Española. Diccionario Usual
Por tanto: Orcotristeza es la tristeza profunda que se deriva de tener el alma propia en un estado de muerte o desolación, fruto de una separación romántica o la muerte de un ser querido. Palabra inventada por Víctor Díaz Goris.
Propiedad intelectual de:
Víctor Díaz Goris.
Reservados todos los derechos de autor.
Santo Domingo, República Dominicana.
Invoco tu nombre
como se invoca a una deidad
que cae en forma de relámpago
sobre el rostro adusto de un viernes
que primero fue sábado
y luego nostalgia.
Invoco tus manos
como se invoca un espejismo
sobre el cual cabalgan
miles de azules hormigas,
las cuales llevan,
adheridos a sus pasos,
miles de ojos de niños decapitados.
Invoco tu aroma
como si me ofrendara yo mismo
al agridulce sabor de un trueno equilátero,
en la fingida quietud de una larga oración de amor
que sabe bien que no será escuchada
ni por los ángeles ni por los demonios.
Invoco tu aliento
como se invoca la sacrosanta mentira de la angustia,
arrodillado silente
ante el venerado altar de la memoria de tus ojos,
donde mi alma sigue ardiendo,
a pesar del tiempo
y a pesar de nosotros.
Invoco tu alma
como se invocan las espinosas luces
de un himno gris lleno de hímenes de doncellas muertas,
prevalido de las todavía vivas antorchas
que han de incendiar la mañana
con la desmemoria de tus besos.
Invoco tu cuerpo
como se invoca vehemente la todopoderosa presencia
del olvido,
en esta acrisolada inquietud de no tenerte,
y en esta perenne orcotristeza*
que me ha dejado tu ausencia.
VÍCTOR DÍAZ GORIS
Orcotristeza*= Orco: (Del lat. orcus, ultratumba, y, por ext., Plutón, dios de la muerte y aun la muerte misma).
1. m. Según la Roma clásica, lugar, contrapuesto a la Tierra, adonde iban a parar los muertos.
2. m. poét. infierno (lugar que habitan los espíritus de los muertos).
Citado de: Real Academia Española. Diccionario Usual
Por tanto: Orcotristeza es la tristeza profunda que se deriva de tener el alma propia en un estado de muerte o desolación, fruto de una separación romántica o la muerte de un ser querido. Palabra inventada por Víctor Díaz Goris.
Propiedad intelectual de:
Víctor Díaz Goris.
Reservados todos los derechos de autor.
Santo Domingo, República Dominicana.
