Araciel Abaddon
Miembro Conocido
(PROLOGO)
En un pueblo Rural del Norte
de España después de la
Guerra Civil, la Religión era
el pan de cada día, no se
podía dejar de ir a Misa
aunque no fuese creyente,
pues te detenían o fusilaban
por la Gloria del fascismo
del hombre, no de Dios,
puesto que Dios no te obliga
a que le reces, ni le hagas
la pelota, permite darte plena
libertad para decidir, todo
lo contrario del hombre.
Pues la doctrina cristiana
era obligada en España por
su Dictador, y por culpa de
la Religión, España se atraso
40 años y un día....Un día como
vuelva, que Dios nos proteja,
y ahora mismo el que Gobierna
le gustaría que volviese.
Pero olvidemos la política,
y hablemos de esta Prosa,
no de ladrones y chorizos.
(NOTA, Y AVISO)
Que nadie se ofenda de esta Jocosa, pues siendo
de aquella Época, en un pueblo, se hablaba mal,
aunque se fuese al Cielo por Dios y por poca cosa.
Pues mandaba mas el lenguaje de palabrotas, que
bailar una buena Jota.
Palabras fuertes explicitas literalmente, así que si
alguno se ofende, cambia de Autor y se diferente.
En Monreal del Campo, un pueblecito Aragonés,
de buena gente y personas rudas sin querer, por
mala educación de sobrado, por no estudiar y
trabajar en el campo, y ser paleto sin otra cosa
que hacer, vivía una Viuda Rica y devota por Dios
y toda su Religión Fascista, que confiaba a Dios
y la Virgen, toda su vida y alma, dinero donado
al Párroco, para ganarse un sitio en el Cielo
y compartir su fe, con todos sus allegados.
Después de morir su marido e ir al Infierno según
ella, por borracho y mujeriego, heredo todas
sus tierras y dinero, y quiso favorecer su vida a
la Iglesia, y solo tenia como compañía a un Lorito
Gris Africano, muy hablador de lo que aprende
y gran conversador con su dueña.
El Lorito, era su vida, su única compañía, en sus
horas sola y aburrida, la beata mujer, le tenia un
gran cariño a aquel animal que la acompañaba,
a todas horas que ella estaba en casa, pues las
otras horas las pasaba en la Iglesia rezando y
dándole las gracias a Dios por ser tan dichosa
con su fe, cristiana.
Una mañana ella tuvo una conversación con
sus otras dos hermanas también beatorras,
como ella, y las dijo así:
-HERMANAS NO QUIERO MORIRME SIN
LLEVARME A MI LORITO CONMIGO, PUES
ES EL ÚNICO QUE ME ESCUCHA Y ME HACE
MUCHA COMPAÑÍA, PERO PARA QUE DIOS
ME PERMITA, LLEVAR A MI PÁJARO CONMIGO,
TENDRÉ QUE CONVERTIRLO EN CRISTIANO...
La mujer se fue a la Iglesia, para proponerle el
caso al Párroco y quedar con el para el bautismo
del animal y convertirlo en cristiano.
La beata le explico, y el Párroco, se
quedo asombrado, pero como la viuda era
muy buena devota, y daba mucho dinero para la
causa de la Iglesia, se lo dijo al Obispo, y
lo que hace por la Iglesia y ser tan buena
cristiana, el Obispo cerro los ojos y se hizo
el loco y le dijo al Párroco, que hiciese lo
que mejor fuese para los feligreses, pero
que eso no saliese del Pueblo a otros Pueblos,
y se corriese la voz.
La Viuda encargo a dos hombres, para llevarse
al Loro en una jaula hasta la Iglesia el Domingo
para el Bautizo del animal y ponerle un nombre
cristiano, para su salvación.
Llego el famoso Domingo, y los dos hombres
rudos de campo sin educación ninguna, entraron
a la casa de la Viuda y recogieron a la jaula y su
Lorito, metido en ella.
El animal llevaba una especie de túnica blanca,
para entrar en la Iglesia cono un niño en su Primera
Comunión, y cargaron al Lorito en un carro arrastrado
por un mulo, y ellos dos montados en el carro, para
llevar por todo el Pueblo al Lorito hasta el Altar de la
Iglesia .
Empezó a rodar el carro despacio por los adoquines
y caminos de las calles del Pueblo, y el frío Invierno,
señalaba por las montañas nubes de tormenta, que
en momentos se acercaba al Pueblo a toda prisa.
Al rato empezó a caer gotas de agua lentamente,
y uno de los acompañantes del Lorito exclamo:
¡HOSTIAS, QUE AGUA MAS FRÍA!, y el otro
compañero, contesto: ¡DÉMONOS PRISA QUE
SI NO ME CONSTIPARE!...
La lluvia empezó a caer con fuerza y no se veía
ni la calle de la neblina de agua que caía en el suelo.
Y el mulo se canso, y se dejo caer al suelo impidiendo,
el viaje a la Iglesia y atrasando el encargo, por ello
uno de ellos se enfado con el mulo y le chillo con rabia,
y muy mala leche:
¡¡LEVANTA!!, ¡CABRÓN!...¡ME CAGO EN LA YEGUA
QUE TE PARIO!....y el compañero le exclamo:
¡¡DALE UNA PATADA EN LOS HUEVOS!!, ¡Y VERAS
COMO SE LEVANTA!...
En eso que un Rallo cayo al lado del carro, y uno de los
hombres asustado exclamo:
¡¡COÑO!!, ¡SI NO ME APARTO ME MATA!...
Por fin, fuese por el Rallo o las maldiciones de los dos
hombres, el mulo se levanto y siguieron el camino en
medio del agua y grandes charcos.
Por fin los dos hombres llegaron al lugar y metieron al
bicho dentro de la Iglesia tapado con un saco, por motivo
de la lluvia y no se mojase, la beata saco unos duros, y
pago a los dos hombres muy contenta y se fuesen a sus
casas. La Viuda, saco al pájaro de la jaula y lo puso en
su dedo, y lo acerco a la pila bautismal, donde esperaba
el Párroco los monaguillos y hermanas de la beatorra, y
demás vecinos y amigos, todos vestidos de ceremonia,
para el Bautizo del Lorito.
El Párroco saco la concha llena de agua bendita en la
pila y la Viuda agachó al Lorito, y el Padre echo el
agua en la cabeza del animal, y el Lorito de repente,
alzo la cabeza y miro al cura y le exclamo:
¡HOSTIAS!, ¡QUE AGUA MAS FRÍA!...
El párroco al escuchar aquello se desmayo y se fue
de espaldas al suelo, y tendido en el Mosaico de la
pila bautismal, el Lorito exclamo:
¡¡PEGARLE UNA PATADA EN LOS HUEVOS!!,
¡ Y VERÉIS COMO SE LEVANTA!...
El Párroco furioso y cabreado, se levanto y le lanzo,
la concha bautismal al Loro, y este le exclamo:
¡¡COÑO!!, ¡SI NO ME APARTO ME MATA!.
Araciel Abaddon.
Todos los derechos reservados de
la obra de la Jocosa.
