Marcela
Miembro Conocido
Te guareces en sus brazos
desoyendo lo incierto.
Te estremeces en el beso
con la magia de los sentidos.
Te cobijas en sus dedos
cuando recorren tu cuerpo.
Te acurrucas en sueños de felicidad
en un lugar de su pecho…
Y descubres, ahí mismo,
cuando apoyas tu cabeza en su torso,
que ése es el mejor refugio.
desoyendo lo incierto.
Te estremeces en el beso
con la magia de los sentidos.
Te cobijas en sus dedos
cuando recorren tu cuerpo.
Te acurrucas en sueños de felicidad
en un lugar de su pecho…
Y descubres, ahí mismo,
cuando apoyas tu cabeza en su torso,
que ése es el mejor refugio.