Sonia Moreno Soto
Miembro Conocido
Y así fueron pasando los días
todo se fue haciendo tan normal,
de la mañana a la noche cada cosa
parecía estar en su lugar.
Los días se sucedían sin descanso
y la rutina hasta parecía entretenida,
los gatos, las flores del jardín
la estufa encendida, el té de la tarde.
El mundo seguía su curso tranquilo
la vida corría y así sus días,
ella se sentía tranquila y escribía
eso le devolvía la vida y sonreía.
Ya no habían príncipes, ni mendigos
era ella sola y su apacible vida,
en sus versos vaciaba su alma
y liberaba todo cuanto sentía.
Ella está sola, ella y su poesía
a veces triste a veces alegre,
depende de lo que ella escriba
y piensa en él y su cara se llena de poesía.
todo se fue haciendo tan normal,
de la mañana a la noche cada cosa
parecía estar en su lugar.
Los días se sucedían sin descanso
y la rutina hasta parecía entretenida,
los gatos, las flores del jardín
la estufa encendida, el té de la tarde.
El mundo seguía su curso tranquilo
la vida corría y así sus días,
ella se sentía tranquila y escribía
eso le devolvía la vida y sonreía.
Ya no habían príncipes, ni mendigos
era ella sola y su apacible vida,
en sus versos vaciaba su alma
y liberaba todo cuanto sentía.
Ella está sola, ella y su poesía
a veces triste a veces alegre,
depende de lo que ella escriba
y piensa en él y su cara se llena de poesía.