CarlosFranco
Miembro Conocido
¡Ella!
Ella es el más dulce y tierno amor (de él)
y ella poco a poquito se enamoró de él;
sus besos los añoraba y soñaba tanto,
deseandolos sólo para él,
ella le veía cada día esperando que le pudiera
querer él.
Él se envició de las tiernas caricias de sus manos (las de ella),
ella se sentia segura bajo su mirada (la de él).
Él no pudo, ni supo detener los suspiros
que escpaban cuando la abrazaba,
y ella que siempre temblaba y se le erizaba la piel
en los brazos de él,
justificando su reacción decia:
"Hace mucho frío hoy"
Pero era pleno mediodía de verano
y él, calor de sol.
Él, le sonrió,
con esa sonrísa que a ella conquistó,
y ella, ya no resistió,
le pidio (y sin decirlo)
aquel beso tan soñado y deseado por los dos.
-¿Y si te beso, qué?.. -Preguntó él.
-"Nada". - Respondió ella, con naturalidad de toda mujer.
¡Pues claro que no pasaba nada!
¡Ya era mucha espera entre los dos!
Ahora que el amor fluye cada día
siendo el mayor bien,
uno dice:
"Yo te amo",
y el otro responde:
"Yo también".
Por las noches viven el mismo sueño juntos
Y son una soga sus brazos
atando a su amado ser,
cada nuevo día, la primer melodía oida
es el palpitar de ese gran querer,
seguida de un buenos días, un beso,
confesiones, caricias en el alma y la piel,
se extrañan cada hora del día
y añoran volverse a ver,
para amarse uno al otro mucho,
pero mucho más que ayer.
Si andando por la calle
ves dos apasionados
y eternos enamorados
tomados de la mano
y demostrando su inmenso querer
sin el tonto prejuicio
(¿Y si nos ven?)
Te aseguro que no te equivocas,
Son, Ella y Él.
<<Cuando el tiempo se detiene, el motivo, eres tú >>
22 de enero de 2021
Carlos Franco
Ella es el más dulce y tierno amor (de él)
y ella poco a poquito se enamoró de él;
sus besos los añoraba y soñaba tanto,
deseandolos sólo para él,
ella le veía cada día esperando que le pudiera
querer él.
Él se envició de las tiernas caricias de sus manos (las de ella),
ella se sentia segura bajo su mirada (la de él).
Él no pudo, ni supo detener los suspiros
que escpaban cuando la abrazaba,
y ella que siempre temblaba y se le erizaba la piel
en los brazos de él,
justificando su reacción decia:
"Hace mucho frío hoy"
Pero era pleno mediodía de verano
y él, calor de sol.
Él, le sonrió,
con esa sonrísa que a ella conquistó,
y ella, ya no resistió,
le pidio (y sin decirlo)
aquel beso tan soñado y deseado por los dos.
-¿Y si te beso, qué?.. -Preguntó él.
-"Nada". - Respondió ella, con naturalidad de toda mujer.
¡Pues claro que no pasaba nada!
¡Ya era mucha espera entre los dos!
Ahora que el amor fluye cada día
siendo el mayor bien,
uno dice:
"Yo te amo",
y el otro responde:
"Yo también".
Por las noches viven el mismo sueño juntos
Y son una soga sus brazos
atando a su amado ser,
cada nuevo día, la primer melodía oida
es el palpitar de ese gran querer,
seguida de un buenos días, un beso,
confesiones, caricias en el alma y la piel,
se extrañan cada hora del día
y añoran volverse a ver,
para amarse uno al otro mucho,
pero mucho más que ayer.
Si andando por la calle
ves dos apasionados
y eternos enamorados
tomados de la mano
y demostrando su inmenso querer
sin el tonto prejuicio
(¿Y si nos ven?)
Te aseguro que no te equivocas,
Son, Ella y Él.
<<Cuando el tiempo se detiene, el motivo, eres tú >>
22 de enero de 2021
Carlos Franco
