Araciel Abaddon
Miembro Conocido
Bajo tu manto desnudo
estoy, y que poder me
hiciste, para por ti
hombre dejar de ser,
cobardemente engañe,
y a mi dama abandone,
por culpa de tus brazos que me
cobije y tu
esclavo siempre seré.
Mujer de labios
ardientes, que me
quemaste para siempre.
mujer apasionada
que me enfrentaste,
hasta con la suerte
de conocerte.
Se consciente que
si sigues así de
frente,me arrastraras
hasta la muerte.
Ya no soy nada, estoy
fundido en tu ser,
me es imposible poseer,
una salida y escapar
de tu alma que tiene
cautivo a mi corazón.
A mi matrimonio
arrastre, toda la
familia perdí, y solo
te tengo a ti.
Que me ocurrirá pena
de mi, cuando empiece
a menguar mi fuego,
y enfriar tu pasión
sin querer.
Me dejaras donde me
cogiste y buscaras
otro barón al cual
arruinar su vida y
su corazón, encendiendo
su fuego, que su dama
no supo encender.
En la noche fría de
letargo estoy en
suelo tumbado sin
poder moverme del frio
intenso, que congela
hasta mi corazón, ya
no hay fuego ni
pasión, solo mendigar
para comer y al raso
bajo las estrellas
dormir.
Todo por una
pasión, un calentón,
que ahora nada calienta
en mi alma, solo en
mi Infierno estoy, sin
calor de hogar ni
familia que abrazar.
Pues yo mismo me
deje guiar por una
falsa pasión, que amor
no hubo, solo falsedad
que ahora comparto
con lealtad a mi futura
amiga la soledad.
Araciel Abaddon.
estoy, y que poder me
hiciste, para por ti
hombre dejar de ser,
cobardemente engañe,
y a mi dama abandone,
por culpa de tus brazos que me
cobije y tu
esclavo siempre seré.
Mujer de labios
ardientes, que me
quemaste para siempre.
mujer apasionada
que me enfrentaste,
hasta con la suerte
de conocerte.
Se consciente que
si sigues así de
frente,me arrastraras
hasta la muerte.
Ya no soy nada, estoy
fundido en tu ser,
me es imposible poseer,
una salida y escapar
de tu alma que tiene
cautivo a mi corazón.
A mi matrimonio
arrastre, toda la
familia perdí, y solo
te tengo a ti.
Que me ocurrirá pena
de mi, cuando empiece
a menguar mi fuego,
y enfriar tu pasión
sin querer.
Me dejaras donde me
cogiste y buscaras
otro barón al cual
arruinar su vida y
su corazón, encendiendo
su fuego, que su dama
no supo encender.
En la noche fría de
letargo estoy en
suelo tumbado sin
poder moverme del frio
intenso, que congela
hasta mi corazón, ya
no hay fuego ni
pasión, solo mendigar
para comer y al raso
bajo las estrellas
dormir.
Todo por una
pasión, un calentón,
que ahora nada calienta
en mi alma, solo en
mi Infierno estoy, sin
calor de hogar ni
familia que abrazar.
Pues yo mismo me
deje guiar por una
falsa pasión, que amor
no hubo, solo falsedad
que ahora comparto
con lealtad a mi futura
amiga la soledad.
Araciel Abaddon.