Que no llore nadie
la desdícha del cabrero.
Pues no le falta la paciencia,
del campo, el conocimiento.
De las hierbas para pastar,
a su rebaño jamás.
!Eso es ciencia!
Sabe lo que cuenta,
nada se inventa.
No hay camino,
no hay atajo en el monte,
para cabras y cabrones,
que evite la inesperada muerte.
Sólo el cabrero los sabe.
Desconfia de aquellos perennes,
de los cuentos enlucídos
reservados a la suerte.
la desdícha del cabrero.
Pues no le falta la paciencia,
del campo, el conocimiento.
De las hierbas para pastar,
a su rebaño jamás.
!Eso es ciencia!
Sabe lo que cuenta,
nada se inventa.
No hay camino,
no hay atajo en el monte,
para cabras y cabrones,
que evite la inesperada muerte.
Sólo el cabrero los sabe.
Desconfia de aquellos perennes,
de los cuentos enlucídos
reservados a la suerte.
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