• Sabías que puedes registrarte o ingresar a tu cuenta directamente desde facebook con el botón de facebook en la parte superior de la página?

Horas apasionadas

HORAS APASIONADAS


Las llevo tan grabadas,
entrelazadas en mis venas,
tanto, que ya blancas mis ansias,
despierto o dormido igual te sueñan.

Apasionadas horas,
interminables vigilias,
de amarte y ser amado,
de darme y recibirte toda.

El solo eco de tu voz,
la dulce miel de tus dulces carcajadas,
el perfume profundo de tu flor,
hacia lúbrica toda mi alma.

Siempre comenzábamos el cortejo;
con un sensual buenos días,
acercándote me acariciabas con tus cabellos
yo con mi nariz besaba tus mejillas.

Era un juego aprendido,
tan grabado en nuestras ansias,
que tu boca y mi boca no emitían sonido,
solo se paseaba el viento de extremo a extremo,
de ansia a ansia.

Ambos éramos la relevancia,
piezas precisas e importantes,
de un juego que no hacía pautas,
de un deseo interminable.

Todo comenzaba al hallar nuestro vértice,
mi deseo cóncavo,
tu apetencia adyacente,
apenas joven el día,
enseñanza prolongada y ardiente.

Me hiciste tuyo con astucia,
con hombría me entregué impaciente,
amé comer de tus manos y tu vientre,
bebí del sumo zumo de tus albricias.

Cuánto amor,
cuántas caricias,
cuántas veces deshoje esa flor,
tantas veces que me amaste sin medida.

Horas apasionadas,
horas que en mi son vida,
tan frescas y tan ciertas,
tanto, que el tiempo y la distancia no podrán borrar de mi vida.


©Luís Guillermo Legrand




Enviado desde mi iPad
 

Azul

Miembro Conocido
Horas tan preciadas , de amor convertido en poesia al volver siempre tan hermoso recuerdo, encantada de leer tu poesiaLuis Guillermo, un abrazo!
 

SANDRA BLANCO

Administradora - JURADO
HORAS APASIONADAS


Las llevo tan grabadas,
entrelazadas en mis venas,
tanto, que ya blancas mis ansias,
despierto o dormido igual te sueñan.

Apasionadas horas,
interminables vigilias,
de amarte y ser amado,
de darme y recibirte toda.

El solo eco de tu voz,
la dulce miel de tus dulces carcajadas,
el perfume profundo de tu flor,
hacia lúbrica toda mi alma.

Siempre comenzábamos el cortejo;
con un sensual buenos días,
acercándote me acariciabas con tus cabellos
yo con mi nariz besaba tus mejillas.

Era un juego aprendido,
tan grabado en nuestras ansias,
que tu boca y mi boca no emitían sonido,
solo se paseaba el viento de extremo a extremo,
de ansia a ansia.

Ambos éramos la relevancia,
piezas precisas e importantes,
de un juego que no hacía pautas,
de un deseo interminable.

Todo comenzaba al hallar nuestro vértice,
mi deseo cóncavo,
tu apetencia adyacente,
apenas joven el día,
enseñanza prolongada y ardiente.

Me hiciste tuyo con astucia,
con hombría me entregué impaciente,
amé comer de tus manos y tu vientre,
bebí del sumo zumo de tus albricias.

Cuánto amor,
cuántas caricias,
cuántas veces deshoje esa flor,
tantas veces que me amaste sin medida.

Horas apasionadas,
horas que en mi son vida,
tan frescas y tan ciertas,
tanto, que el tiempo y la distancia no podrán borrar de mi vida.


©Luís Guillermo Legrand




Enviado desde mi iPad

Hola Luis Guillermo bienvenido a esta casa que desde ya es tu casa esperamos te sientas cómodo,lo que necesites a las órdenes.
Tus versos son precioso evocando un amor entregado y profundo,cuando el amor es tan fuerte no lo borra ni el tiempo ni la distancia,precioso poema,un gusto leerte,gracias por compartir,un beso grande.
 
antes que nada bienvenido al portal Luis Guillermo, espero que te sientas como en casa, bellísimos versos nos regalas, con la nostalgia del amor y la pasión compartidas, un amor así nunca se olvida, un enorme placer leerte, besos
 

RADIO EN VIVO

Donar

Versos Compartidos en Facebook

Arriba