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Miembro Conocido
Mujer, tù me arrebatas la calma
y te apoderas de mì
por eso me abandono a tus deseos.
Preservo mi inocencia y me transformo
entregàndome a las delicias del amor,
camino en el rumor del pensamiento
hasta llegar al aliento de la memoria
donde consigo tu nombre
palpitando por la fuerza del recuerdo.
Tu cuerpo desnudo grita
para sembrar en tu figura
deseos, pasiòn y placer,
que como una alfombra de flores
reposan en tu mundo de inquietudes,
donde no hay versos
que escriban los poetas
para el olvido ni el delirio;
porque nos devora el silencio
seduciendo nuestra piel
como el Cielo a la noche.
Mientras, el vuelo de una mariposa
hace eco en nuestros corazones
trayendo hasta nosotros preludios de amor.
18/05/2015
Ysidro Parra - Venezuela
Reservados Derechos de Autor.
y te apoderas de mì
por eso me abandono a tus deseos.
Preservo mi inocencia y me transformo
entregàndome a las delicias del amor,
camino en el rumor del pensamiento
hasta llegar al aliento de la memoria
donde consigo tu nombre
palpitando por la fuerza del recuerdo.
Tu cuerpo desnudo grita
para sembrar en tu figura
deseos, pasiòn y placer,
que como una alfombra de flores
reposan en tu mundo de inquietudes,
donde no hay versos
que escriban los poetas
para el olvido ni el delirio;
porque nos devora el silencio
seduciendo nuestra piel
como el Cielo a la noche.
Mientras, el vuelo de una mariposa
hace eco en nuestros corazones
trayendo hasta nosotros preludios de amor.
18/05/2015
Ysidro Parra - Venezuela
Reservados Derechos de Autor.
