Araciel Abaddon
Miembro Conocido
La Salud traiciona la hombría, y nos hace ver que no somos nada, que podemos fallecer en cualquier momentos sin ver y saber el porqué y como fue.
Podemos interactuar, producir, trabajar, inventar, escribir, amar, hacer daño, disfrutar, mirar vistas al futuro, recordar el pasado.
Pero no sabemos cuándo vamos a perder el control de nosotros mismos y desfallecer o fallecer sin poderlo evitar, y si será solo o acompañado, o en cualquier lugar.
La solución es no pensar, pero si estar preparado por lo que pueda venir en cualquier momento y lugar, pues viene sin avisar, y cuando más necesitas ayuda familiar, solo estas, porque es ley de vida vivir como adulto y saber andar sin llevarte a nadie detrás.
Ya he visto y saboreado la Muerte en diez ocasiones en mi cuerpo, y no es agradable
saber que puede venir en cualquier momento y no darte tiempo arreglar asuntos , abandonar a los tuyos, y arrepentirte de algunas malas acciones, o devolver algo que debas.
Cuando te vas, en ese momento cercano a la muerte ya no piensas en nada más, sientes como tu cuerpo te abandona y tú te sientes necesitado de salir de él, pues tu alma no puede quedarse más en tu cuerpo, y tu corazón es como un Capitán de barco y lo abandona contigo casi a la vez después de ti, y todo termina ahí.
Tu corazón, tu alma viaja a la luz con tus seres queridos y conocidos que te ofrecen la mano, que ya no son padres, ni amigos, ni hijos, ni hermanos, ni primos, pues son como tú, almas viajeras que descansan sin cuerpo, energías
Espíritus que si no terminaron en carne en la Tierra lo que tenían que hacer o hicieron el mal, volverán a nacer y pagaran su castigo sufriendo en sus carnes lo que su alma hizo en la anterior vida suya, eso es el Purgatorio, la Tierra es nuestra escuela, educación del alma, y el Infierno al mismo tiempo.
Todo se perdona con el tiempo, pero no antes sin sufrir y ver, que solo somos humanos, y no tenemos poder sobre nadie ni nada, y no tenemos derecho a matar vidas ni maltratar a nadie, porque se paga tarde o temprano con la muerte y la Soledad y vergüenza de tu mal proceder y que nadie ni te quiera ver.
Si actúas bien y ayudas desinteresadamente al que lo necesita, este estará agradecido a ti, el resto de su vida, ¿no será más bonito así?,
¿Quedar bien y ser admirado, que no que la gente se aparte de ti?,
Cierto que la mala educación y mal nacer en la pobreza o maldad, o nacer hijo de papa (rico) y ser déspota y grosero con los demás, influye en el mal carácter y forma de obrar, pero el que nace con sentido común, todo eso no le afectara jamás, sea pobre o rico.
Con esto hago ver que no hay escusa posible, el que nace malo, malo es, y el que nace bueno da igual que lo haga pobre o rico. Todos somos iguales, pero no perfectos, si fuese así, nadie haría jamás daño a nadie, ni inventaría ni trastocaría falsas Religiones para someter y esclavizar a nadie, pues solo el Grandísimo puede someter al hombre, y no lo hace, porque aunque adultos, somos como niños traviesos que no hacemos más que complicarnos y complicar a otros una cosa tan sencilla como es la vida, y el permite que nos equivoquemos una y otra vez, hasta que despertemos de nuestros errores, y nos demos cuenta de nuestro mal proceder, a base de nacer y volver a nacer, hombre o mujer.
Araciel Abaddon.
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