Victor Diaz Goris
Miembro Conocido
LA UMBELA DE TUS LABIOS
Me hablas
y una guitarra con la forma de tus ojos
se enciende sobre mi piel
y derrite tus palabras
perfumando mi alma de ti.
Me hablas
y la noche se ilumina con tu voz
convirtiendo la hierba
en una blanca extensión de tu nombre
y la luna en una tierna
prolongación de tu piel.
Me hablas
y un asfódelo de ojos esmeralda
abre sus pétalos en tus labios
y la tarde se ilumina
con la verde melodía de tu aliento
y el dulce pistilo de tu voz.
Me hablas
y mis ojos pueden escuchar tus besos
ascender sin prisa
desde tu boca hasta mi piel
y mis oídos pueden ver tus labios
besar la punta de mi alma
que adquiere la forma de un verso azul
que nace y muere por ti.
Me hablas
y una cifra con alas va desde tu boca a la mía
cabalgando con señorío
hasta los cármenes de mi alma
sobre el aroma de un rubí con piel de agosto
y la clara textura de un zafiro
que una virgen deslizó sobre su piel.
Me hablas
y un violoncelo con ojos de ondina en celo
umbela sus notas sobre mi angustia
mientras tus palabras de amanecer descalzo
con su textura de agua dulce
cambian la forma y el color de la tarde
y la convierten por derecho propio
en una firme extensión de tu nombre
Me hablas
y tu mirada viaja con tus palabras
hasta mi voz y su estatura de cíclope descalzo
y ya la noche no existe
porque el poderoso astro de tus mandatos
la convirtió en luz.
VÍCTOR DÍAZ GORIS
Reservados todos los derechos de autor.
Propiedad intelectual de:
Víctor Díaz Goris.
Santo Domingo, República Dominicana.
Me hablas
y una guitarra con la forma de tus ojos
se enciende sobre mi piel
y derrite tus palabras
perfumando mi alma de ti.
Me hablas
y la noche se ilumina con tu voz
convirtiendo la hierba
en una blanca extensión de tu nombre
y la luna en una tierna
prolongación de tu piel.
Me hablas
y un asfódelo de ojos esmeralda
abre sus pétalos en tus labios
y la tarde se ilumina
con la verde melodía de tu aliento
y el dulce pistilo de tu voz.
Me hablas
y mis ojos pueden escuchar tus besos
ascender sin prisa
desde tu boca hasta mi piel
y mis oídos pueden ver tus labios
besar la punta de mi alma
que adquiere la forma de un verso azul
que nace y muere por ti.
Me hablas
y una cifra con alas va desde tu boca a la mía
cabalgando con señorío
hasta los cármenes de mi alma
sobre el aroma de un rubí con piel de agosto
y la clara textura de un zafiro
que una virgen deslizó sobre su piel.
Me hablas
y un violoncelo con ojos de ondina en celo
umbela sus notas sobre mi angustia
mientras tus palabras de amanecer descalzo
con su textura de agua dulce
cambian la forma y el color de la tarde
y la convierten por derecho propio
en una firme extensión de tu nombre
Me hablas
y tu mirada viaja con tus palabras
hasta mi voz y su estatura de cíclope descalzo
y ya la noche no existe
porque el poderoso astro de tus mandatos
la convirtió en luz.
VÍCTOR DÍAZ GORIS
Reservados todos los derechos de autor.
Propiedad intelectual de:
Víctor Díaz Goris.
Santo Domingo, República Dominicana.