Víctor
Moderador de Poesía Jocosa
Tres fulanos que salieron
bastante briagos de un bar,
a un taxista le dijeron
que si los podía llevar.
El taxista se dio cuenta
de la briaguez que traían,
y en cuanto los tres se sientan
les hizo esta fechoría:
Ya estando en el interior,
el taxista en ese rato,
encendió pronto el motor
y lo apagó de inmediato.
Luego le dijo a los tres,
sin recorrer ningún tramo:
Ya páguenme de una vez,
sucede que ya llegamos.
El primero le pagó
y gracias le dio el segundo,
y el tercero muy rotundo
un bofetón le plantó.
El taxista un tanto extraño
presuntamente pensó
que el briago que le pegó
se dio cuenta del engaño.
Y luego le preguntó
que por qué le había pegado,
y el borracho contestó
bastante malhumorado:
Es que cuenta me dí yo,
que por la pista volamos,
y al manejar tan veloz,
por poquito nos matamos.
Última edición:
