Blanca Hernandez
Miembro Conocido
Me devolvió la musa el genio
que llueven las palabras,
para inventar, historias y sueños,
la magia extraña, de un cuento.
La vida, ya nunca más podrá
marchitar rosas y perfumes,
porque embrujaron mis labios
dulces besos, con gran amor.
Tal vez se oculte la luna
con sus reproches de sombras,
cuando me vea en tus brazos,
junto al canto de la alondra.
Te estoy amando, con amor puro
me lleva, a la montaña de la gloria
te amaré con un cáliz, de tibia brisa
este amor que llena mi memoria.
Los besos que besaron mi piel
en este enero tan lleno de flores,
hacen que mis ojos se deslicen,
en la suave estructura, de tu cuerpo.
Este cálido viento, traen a mi piel
sombras y luces de atardeceres,
el mismo sol, que acaricia tu rostro,
me devuelve la vida compartida
que llueven las palabras,
para inventar, historias y sueños,
la magia extraña, de un cuento.
La vida, ya nunca más podrá
marchitar rosas y perfumes,
porque embrujaron mis labios
dulces besos, con gran amor.
Tal vez se oculte la luna
con sus reproches de sombras,
cuando me vea en tus brazos,
junto al canto de la alondra.
Te estoy amando, con amor puro
me lleva, a la montaña de la gloria
te amaré con un cáliz, de tibia brisa
este amor que llena mi memoria.
Los besos que besaron mi piel
en este enero tan lleno de flores,
hacen que mis ojos se deslicen,
en la suave estructura, de tu cuerpo.
Este cálido viento, traen a mi piel
sombras y luces de atardeceres,
el mismo sol, que acaricia tu rostro,
me devuelve la vida compartida
Última edición:
