Tengo un amigo que es,
todo amor desdichado.
Es amor en manifestación,
y hasta forma algaradas,
buscando un poco de sexo.
Su corazón enloquecido,
no entiende de nada.
Solo los sábados,
empieza a pensar;
como ponerse bonito,
y salir a bailar.
Dando pávulo al refrán,
del sábado sabadete.
Con suerte el domingo,
estará solo cansado.
Y dolorida su cartera,
por la tremenda borracherra,
que le perdió la cabeza.
Pero yo no me líbro,
pues todos los lunes,
me cuenta sus penas.
Y me pregunto:
¿Dónde estará?
la mujer que le libre de ellas.
¿Dónde estará?
quíen me libre de este amigo,
al que quiero en demasía.
Aunque ese dia,
siempre me cuente lo mísmo.
todo amor desdichado.
Es amor en manifestación,
y hasta forma algaradas,
buscando un poco de sexo.
Su corazón enloquecido,
no entiende de nada.
Solo los sábados,
empieza a pensar;
como ponerse bonito,
y salir a bailar.
Dando pávulo al refrán,
del sábado sabadete.
Con suerte el domingo,
estará solo cansado.
Y dolorida su cartera,
por la tremenda borracherra,
que le perdió la cabeza.
Pero yo no me líbro,
pues todos los lunes,
me cuenta sus penas.
Y me pregunto:
¿Dónde estará?
la mujer que le libre de ellas.
¿Dónde estará?
quíen me libre de este amigo,
al que quiero en demasía.
Aunque ese dia,
siempre me cuente lo mísmo.
Última edición: