Cristina Guerrero S
Miembro Conocido
MUERTE EN VIDA.
Hay un nicho entre la ruina y la ladera de la desdicha,
un nicho frío y petrificado que captura a diario mi sonrisa,
se cobija en la sombra de la pestilencia amarga de un sueño herido,
carcome las paredes de un momento viejo y entrega al viento mi falsa sonrisa.
Hay un poco de cemento roto en la esquina oscura del tiempo,
y entre sus poros contiene lo que ayer era un deseo,
una caricia perdida, un tibio beso enfermo
de mi madre que moría en el nicho de al lado, bajo un cruel golpe certero.
Hay un río en la locura,
uno que penetra con su fragancia pura,
lleno de sonrisas que eran mágicas al principio,
pero que hoy retumban en mis oídos, como llanto amargo de una oscuridad sin cura.
Eran de niños las sonrisas, a quienes creí gustar,
interpreté mi mejor bostezo y hasta sonreí entre la bruma,
pero el llanto fue mi paga que apestaba a burlas,
y este nicho se tornó húmedo con olor a muerte
pero a una muerte en vida.
Hay un nicho entre la basura que se transformó en mi hogar y en el de mi amargura,
un nicho helado con trozos de cemento,
recuerdos de un ayer mejor,
de aullidos poderosos en mi edad de juventud
cuando se distinguía mi bravura,
Hoy es un sitio sin aullidos,
sin cánticos de la selva,
sin un río cristalino,
hoy es el hogar de mi muerte,
pero de una muerte en vida.
"La inteligencia humana es limitada al no ser fusionada con la sabiduría interna... entonces creemos que nuestros actos "inteligentes" de abuso, nos hacen seres superiores, pero en verdad, solo nos hacen tristes seres aun más limitados"
Hay un nicho entre la ruina y la ladera de la desdicha,
un nicho frío y petrificado que captura a diario mi sonrisa,
se cobija en la sombra de la pestilencia amarga de un sueño herido,
carcome las paredes de un momento viejo y entrega al viento mi falsa sonrisa.
Hay un poco de cemento roto en la esquina oscura del tiempo,
y entre sus poros contiene lo que ayer era un deseo,
una caricia perdida, un tibio beso enfermo
de mi madre que moría en el nicho de al lado, bajo un cruel golpe certero.
Hay un río en la locura,
uno que penetra con su fragancia pura,
lleno de sonrisas que eran mágicas al principio,
pero que hoy retumban en mis oídos, como llanto amargo de una oscuridad sin cura.
Eran de niños las sonrisas, a quienes creí gustar,
interpreté mi mejor bostezo y hasta sonreí entre la bruma,
pero el llanto fue mi paga que apestaba a burlas,
y este nicho se tornó húmedo con olor a muerte
pero a una muerte en vida.
Hay un nicho entre la basura que se transformó en mi hogar y en el de mi amargura,
un nicho helado con trozos de cemento,
recuerdos de un ayer mejor,
de aullidos poderosos en mi edad de juventud
cuando se distinguía mi bravura,
Hoy es un sitio sin aullidos,
sin cánticos de la selva,
sin un río cristalino,
hoy es el hogar de mi muerte,
pero de una muerte en vida.
"La inteligencia humana es limitada al no ser fusionada con la sabiduría interna... entonces creemos que nuestros actos "inteligentes" de abuso, nos hacen seres superiores, pero en verdad, solo nos hacen tristes seres aun más limitados"
