JAVIER TOMAS
Sub Administrador
Cuando la noche toca los sentimientos
y los momentos de pausa,
cuando el frío agarrota la esperanza
y las bisagras de las salidas,
entonces, y solo entonces,
se conoce la estirpe del luchador,
el que cae y levanta,
el que lucha sin tregua,
el que partida el alma
saca fuerzas de su voluntad
y doblega a su enemigo
dándole aliento
ánimos
calor
porque el enemigo,
el mayor enemigo
que uno tiene
nace con él,
muere con él
y respira con él,
que nadie puede hacernos
más daño
que nuestro reflejo
en el espejo.
y los momentos de pausa,
cuando el frío agarrota la esperanza
y las bisagras de las salidas,
entonces, y solo entonces,
se conoce la estirpe del luchador,
el que cae y levanta,
el que lucha sin tregua,
el que partida el alma
saca fuerzas de su voluntad
y doblega a su enemigo
dándole aliento
ánimos
calor
porque el enemigo,
el mayor enemigo
que uno tiene
nace con él,
muere con él
y respira con él,
que nadie puede hacernos
más daño
que nuestro reflejo
en el espejo.