JAVIER TOMAS
Sub Administrador
Ocre, que tiñes los rincones
con hojas viajeras
mecidas por el viento,
entre aromas de humedad
y chimeneas,
de pucheros y asados,
de tabernas viciadas
al resguardo de las aguas.
Te despedí con pena
y abrigado de las nieves
y ahora vuelves a mi
robando mis horas de luz
acallando el gentío
que chapoteaba entre risas.
Inexorable, llegas sin ser llamado
aunque a veces deseado
ante estíos mal intencionados.
Aquí me tienes
dispuesto a mimarte,
como tantas veces,
en esos paseos campestres
donde tus colores
calman mi alma
y enamoran mis sentidos.
con hojas viajeras
mecidas por el viento,
entre aromas de humedad
y chimeneas,
de pucheros y asados,
de tabernas viciadas
al resguardo de las aguas.
Te despedí con pena
y abrigado de las nieves
y ahora vuelves a mi
robando mis horas de luz
acallando el gentío
que chapoteaba entre risas.
Inexorable, llegas sin ser llamado
aunque a veces deseado
ante estíos mal intencionados.
Aquí me tienes
dispuesto a mimarte,
como tantas veces,
en esos paseos campestres
donde tus colores
calman mi alma
y enamoran mis sentidos.
