Antonio Jurado Rivera
Miembro Conocido
En la desnuda arboleda
cambiaron el color verde
por otros tonos de ocres
amarillentos o férreos.
Las hojas que se secaron
muertas cayeron al suelo
y el viento va formando olas
de unos tonos muy diversos
que al moverse parecieran
como el agua en el océano,
enseñando al natural
brillos de colores bellos
y la alfombra de hojas secas
luciendo por los paseos.
Las plazas y las aceras
parecen estar teñidas
de color de sangre y fuego
diciéndonos que el otoño
se quedará entre nosotros
hasta que llegue el invierno.
Todo empezará a cambiar
el sol ya se irá perdiendo
y las aves marcharán
buscando calores nuevos.
Y volverá la tristeza
sobre los bancos del parque,
a las caras de los niños,
a la ilusión de los jóvenes
y al corazón de los viejos.
Mientras dos enamorados
se dan un beso robado
sobre los columpios quietos.
Antonio Jurado (España)
© Derechos reservados