Antonio Jurado Rivera
Miembro Conocido
Delante del grupo de la procesión
subía mi niña por una ladera
traté de acercarme con toda intención
su madre, a su lado ni pizca se aleja.
La niña me mira y se ruboriza
lucen sus mofletes puro carmesí
¡que linda hermosura lucía mi amada
con sus ademanes de bella princesa!.
Mientras admiraba su dulce mirada
su hermana mayor me mira y sonríen
su preciosos ojos de pupila inquieta
al ver en mis ojos a su niña buena.
Susurró, que yo me quedara atrás
para que su madre no se diera cuenta,
mientras me decía - yo os ayudaré
me tendió su mano subiendo la cuesta.
Así comprendí que entre ellas dos
hablaron de mí porque estaba claro
que al adivinar que éramos novios
parecía halagada y estar satisfecha.
Se hizo la cómplice de nuestro cariño,
sonreía con gracia, sin darle vergüenza
mientras que yo aún, detrás de su madre
seguía adulando a mi niña bella.
Con sus negros ojos, su caríta linda,
tirándole besos y miradas tiernas,
cuando le decía cuánto la quería,
brillaban sus risas y sus bellos ojos
se izaban al cielo con sus largas trenzas.
Semilla de amor que iba floreciendo
y se abría camino entre las tinieblas,
nuestras ilusiones seguían el sendero
para, poco a poco llegar a la vida,
que ya nos mostraba sus puertas abiertas.
Antonio Jurado (España)
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