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Miembro Conocido
Temblaba tu piel de ébano
en el dorado jardín de tus encantos,
y triunfante y jubilosa
tu alma enamorada fue mi amante.
Floté en la luz que iluminó tu boca
y volé hacia ti para besar
el fuego de tus labios,
y en el éxtasis del momento para amar
comprendí que nuestro amor
no es tan solo por un día;
porque nutrido
por la savia que alimenta el corazón
se hacia eterno
en los brazos del deseo y la pasión.
Busqué en los besos de tu boca
la leche y la miel de tus antojos
y en el manto de tu cuerpo
el infinito espejo
que alienta el rostro de los tiempos.
Mi corazón es un poema
que rima sus latidos con los tuyos
y en su lírico y palpitante son
deja escapar un perfume de seda y de sueños
que despiertan el sonoro placer que te consume
¡Oh amada mía!
Nuestro amor es para siempre
y con su vibrante fuerza
estremece las rosas de tu pecho
y el exquisito manjar que hay en tu cielo.
11/03/2016
Ysidro Parra - Venezuela
Reservados Derechos de Autor.
en el dorado jardín de tus encantos,
y triunfante y jubilosa
tu alma enamorada fue mi amante.
Floté en la luz que iluminó tu boca
y volé hacia ti para besar
el fuego de tus labios,
y en el éxtasis del momento para amar
comprendí que nuestro amor
no es tan solo por un día;
porque nutrido
por la savia que alimenta el corazón
se hacia eterno
en los brazos del deseo y la pasión.
Busqué en los besos de tu boca
la leche y la miel de tus antojos
y en el manto de tu cuerpo
el infinito espejo
que alienta el rostro de los tiempos.
Mi corazón es un poema
que rima sus latidos con los tuyos
y en su lírico y palpitante son
deja escapar un perfume de seda y de sueños
que despiertan el sonoro placer que te consume
¡Oh amada mía!
Nuestro amor es para siempre
y con su vibrante fuerza
estremece las rosas de tu pecho
y el exquisito manjar que hay en tu cielo.
11/03/2016
Ysidro Parra - Venezuela
Reservados Derechos de Autor.