Araciel Abaddon
Miembro Conocido
El día que te abrace
por primera vez, y en
el aire te retenga
cruzados tus pies,
sobre mi cintura, que
te ayuda a sostener
tu cuerpo en el mío,
una y otra vez.
¿Podre soltarte?,o te
retendré por si es
un sueño y te perderé.
Te abrazo con ganas
y no se, si te soltare,
temo que te bayas y
no te vuelva a ver.
Busco tus labios y
cuando te descuides
un beso te daré, sin
soltar tu cuerpo
sobre mi cintura que
te retiene en mi ser.
Llorare de emoción
después de tantos
años con devoción
hacia ti.
No me creeré que
estas aquí, junto
a mi corazón, y
tan contento estaré,
que reiré y llorare
de alegría y felicidad.
Tendré entre mis brazos
a mi amiga tan estimada,
pura de corazón como
es ella, y podre mirarla
a lo ojos sin que nada
se interponga entre
los dos, ella y yo, una
gran amistad que nadie
puede ni pensar, que sea
real.
Pero eso no importa,
lo que los demás piensen,
solo importa que ella
se sienta bien acompañada
por mi corazón que la
arropa y la quiere con
cariño, para que sea feliz.
Que nadie envidie esta
bonita amistad, pues es
tan clara que el agua
de la fuente que no para
de manar frescura que
calma la sed, de las
personas de muy buena
voluntad.
Araciel Abaddon.
por primera vez, y en
el aire te retenga
cruzados tus pies,
sobre mi cintura, que
te ayuda a sostener
tu cuerpo en el mío,
una y otra vez.
¿Podre soltarte?,o te
retendré por si es
un sueño y te perderé.
Te abrazo con ganas
y no se, si te soltare,
temo que te bayas y
no te vuelva a ver.
Busco tus labios y
cuando te descuides
un beso te daré, sin
soltar tu cuerpo
sobre mi cintura que
te retiene en mi ser.
Llorare de emoción
después de tantos
años con devoción
hacia ti.
No me creeré que
estas aquí, junto
a mi corazón, y
tan contento estaré,
que reiré y llorare
de alegría y felicidad.
Tendré entre mis brazos
a mi amiga tan estimada,
pura de corazón como
es ella, y podre mirarla
a lo ojos sin que nada
se interponga entre
los dos, ella y yo, una
gran amistad que nadie
puede ni pensar, que sea
real.
Pero eso no importa,
lo que los demás piensen,
solo importa que ella
se sienta bien acompañada
por mi corazón que la
arropa y la quiere con
cariño, para que sea feliz.
Que nadie envidie esta
bonita amistad, pues es
tan clara que el agua
de la fuente que no para
de manar frescura que
calma la sed, de las
personas de muy buena
voluntad.
Araciel Abaddon.
