Araciel Abaddon
Miembro Conocido
¡Soy virgo!, una chica alegre
y liberal, con la gente que me
quiera amar.
No me gustan los violadores,
que atacan a traición sin avisar.
Y buscan su satisfacción, sin
contar con mi amor y soledad.
que reparto amor a todo el que
me quiera ayudar y amar.
Tengo miedo de que entren
en mi casa: Avenida la Concepción
nº20, piso 3, puerta-7, y me violen
sin avisar ni mirar, si tengo ahora
ganas de formicar.
Temo lo peor, pues soy despistada,
y me dejo la puerta de la entrada
entre abierta sin cesar.
Lo peor es que me pillen en la ducha,
desnuda y desamparada, pues si la
puerta esta cerrada, siempre me dejo
la ventana del baño, de par en par, y
seria muy fácil que el violador entrase
por ella sin dudar.
Estaría a su merced y no podría gritar,
por estar afónica de la garganta, con
un mal pesar.
No podría llamar a la policía, porque
descuelgo el teléfono, para descansar,
y no puedo defenderme porque me
desmallo fácilmente sin oponer
resistencia, al que me viole sin parar.
Tengo miedo, al que me ataque, no
terminen su violación, y me hayan
molestado, para nada sin condición.
Pues ya que a una la violan, que por
lo menos, sea de verdad, así me quejare
para que se animen a venir mas.
Araciel Abaddon.
Todos los derechos reservados del
Autor de la obra.
y liberal, con la gente que me
quiera amar.
No me gustan los violadores,
que atacan a traición sin avisar.
Y buscan su satisfacción, sin
contar con mi amor y soledad.
que reparto amor a todo el que
me quiera ayudar y amar.
Tengo miedo de que entren
en mi casa: Avenida la Concepción
nº20, piso 3, puerta-7, y me violen
sin avisar ni mirar, si tengo ahora
ganas de formicar.
Temo lo peor, pues soy despistada,
y me dejo la puerta de la entrada
entre abierta sin cesar.
Lo peor es que me pillen en la ducha,
desnuda y desamparada, pues si la
puerta esta cerrada, siempre me dejo
la ventana del baño, de par en par, y
seria muy fácil que el violador entrase
por ella sin dudar.
Estaría a su merced y no podría gritar,
por estar afónica de la garganta, con
un mal pesar.
No podría llamar a la policía, porque
descuelgo el teléfono, para descansar,
y no puedo defenderme porque me
desmallo fácilmente sin oponer
resistencia, al que me viole sin parar.
Tengo miedo, al que me ataque, no
terminen su violación, y me hayan
molestado, para nada sin condición.
Pues ya que a una la violan, que por
lo menos, sea de verdad, así me quejare
para que se animen a venir mas.
Araciel Abaddon.
Todos los derechos reservados del
Autor de la obra.