Daniel
Miembro Conocido
Yo soy un verbo que aflora,
la furia del vendaval,
el ruego de un niño en pena,
y su lengua sin bozal.
Coplas de amor y ternura
mis letras han de arrullar,
pero contra la injusticia
su voz habré de elevar.
En su vida el ser humano
ha de hallar rocas, espinas,
selvas y bosques oscuros,
avernos en las esquinas.
Pero también hallará
la flor que arome su senda,
la luz que guíe su calma
y la fe que en él trascienda.
Coplas que son como manos
a orillas del corazón,
se extienden si son amigas
o te dan un coscorrón.
Yo soy el raigón antiguo,
el nuncio de la existencia,
aprende de este mensaje
y valora su sapiencia.
Siempre ayuda al desvalido
no importe credo o su raza,
que cuando llegue la muerte
aplastará tu coraza.
Coplas que el viejo cantaba
mientras mecía mi cuna
seguro que desde el cielo
es su orgullo mi fortuna.
Yo soy su canción al viento,
ternuras y vendaval,
el ruego de un niño en pena,
y su lengua sin bozal.
la furia del vendaval,
el ruego de un niño en pena,
y su lengua sin bozal.
Coplas de amor y ternura
mis letras han de arrullar,
pero contra la injusticia
su voz habré de elevar.
En su vida el ser humano
ha de hallar rocas, espinas,
selvas y bosques oscuros,
avernos en las esquinas.
Pero también hallará
la flor que arome su senda,
la luz que guíe su calma
y la fe que en él trascienda.
Coplas que son como manos
a orillas del corazón,
se extienden si son amigas
o te dan un coscorrón.
Yo soy el raigón antiguo,
el nuncio de la existencia,
aprende de este mensaje
y valora su sapiencia.
Siempre ayuda al desvalido
no importe credo o su raza,
que cuando llegue la muerte
aplastará tu coraza.
Coplas que el viejo cantaba
mientras mecía mi cuna
seguro que desde el cielo
es su orgullo mi fortuna.
Yo soy su canción al viento,
ternuras y vendaval,
el ruego de un niño en pena,
y su lengua sin bozal.
