Víctor
Moderador de Poesía Jocosa
Doce niños atrapados
en una cueva silente
que inhóspita se encontraba,
fueron al fin rescatados
entre la turbia corriente
que el aluvión le dejaba.
Las hoquedades habidas
en las partes inundadas
con sus patéticas bullas
fueron con fe combatidas
por unas manos sagradas
que Dios tocó con las suyas.
Después de estar apresados
esos niños tailandeses
que se hallaban angustiados
Ahora fueron salvados
de ahí, donde muchas veces
fueron intentos frustrados..
Por buzos que desafiaron
con entereza ferviente,
aquel insondable abismo,
y hasta sus antros llegaron
con una actitud valiente,
dando muestras de heroísmo.
Con esa ayuda divina
y con enseñanza diestra
llegaron a esas entrañas,
ya que si Dios ilumina
francamente se demuestra
que la fe mueve montañas.
Por tan gloriosa proeza
vaya el reconocimiento
del mundo con gran cariño,
que exalta más su grandeza
y están en el pensamiento
y el pecho de cada niño.
Todo el mundo había rezado
para mirar culminada
su bendecida misión.
Y al ver que ya se ha logrado
queda más que comprobada
la fuerza de la oración.
en una cueva silente
que inhóspita se encontraba,
fueron al fin rescatados
entre la turbia corriente
que el aluvión le dejaba.
Las hoquedades habidas
en las partes inundadas
con sus patéticas bullas
fueron con fe combatidas
por unas manos sagradas
que Dios tocó con las suyas.
Después de estar apresados
esos niños tailandeses
que se hallaban angustiados
Ahora fueron salvados
de ahí, donde muchas veces
fueron intentos frustrados..
Por buzos que desafiaron
con entereza ferviente,
aquel insondable abismo,
y hasta sus antros llegaron
con una actitud valiente,
dando muestras de heroísmo.
Con esa ayuda divina
y con enseñanza diestra
llegaron a esas entrañas,
ya que si Dios ilumina
francamente se demuestra
que la fe mueve montañas.
Por tan gloriosa proeza
vaya el reconocimiento
del mundo con gran cariño,
que exalta más su grandeza
y están en el pensamiento
y el pecho de cada niño.
Todo el mundo había rezado
para mirar culminada
su bendecida misión.
Y al ver que ya se ha logrado
queda más que comprobada
la fuerza de la oración.
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