Blanca Hernandez
Miembro Conocido
A mi esposo...mi primera vez. con quién
estuve cuarenta y nueve años casada,
hasta que Dios se lo llevó...
Con mi mochila jovencita
yo fui feliz a tu encuentro,
mi voz era muy suavecita
pero llevaba sentimiento.
Vestida de color esperanza
sin la huella, de una historia,
tu me inspirabas confianza
y fuerza audaz, sin memoria.
Con tu gran espíritu movible
no hay candado, que no abra,
me volviste así, transferible
con tus dulces palabras.
Manantial, de caricias dulces
dejaste a mi alma borracha,
fuiste encendiendo, mis luces
pasión que derritió, escarcha.
Me precipité, a cálidos abrazos
con mis locuras muy febriles,
me seduje, con tus bellos trazos
gozando por ardientes carriles.
Como mar agitado, embravecido
ola que golpea incontrolable,
a mi alma, tú así has derretido
con un amor perenne, inolvidable
estuve cuarenta y nueve años casada,
hasta que Dios se lo llevó...
Con mi mochila jovencita
yo fui feliz a tu encuentro,
mi voz era muy suavecita
pero llevaba sentimiento.
Vestida de color esperanza
sin la huella, de una historia,
tu me inspirabas confianza
y fuerza audaz, sin memoria.
Con tu gran espíritu movible
no hay candado, que no abra,
me volviste así, transferible
con tus dulces palabras.
Manantial, de caricias dulces
dejaste a mi alma borracha,
fuiste encendiendo, mis luces
pasión que derritió, escarcha.
Me precipité, a cálidos abrazos
con mis locuras muy febriles,
me seduje, con tus bellos trazos
gozando por ardientes carriles.
Como mar agitado, embravecido
ola que golpea incontrolable,
a mi alma, tú así has derretido
con un amor perenne, inolvidable
Última edición: