angela rodriguez
Miembro Conocido
A MI MADRE...
::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::
::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::
Una madre que nunca amó.
********************************
Diste tu vientre a una semilla de amor
Vida, latir, respiración.
Germinó como una flor
Pero no encontró amor.
Se hicieron tus brazos para acunar,
Tu vos para la canción de cuna al anochecer,
Se hizo tu mano para apoyar
Y tu vida para proteger.
Nunca supiste amar
Pero nunca supe porqué
Y aunque la flor no marchitó
En el paso del tiempo
Sufrió, lloró, te buscó, te necesitó,
Aunque diste tu presencia;
Nunca te encontró,
Esa flor fui yo,
Sigo siendo yo...
Han pasado veinticuatro años
De soledad,
De vivir con la necesidad
De un gesto sencillo,
De un regalo fácil de entregar;
Un simple abrazo no te pido más.
Cada día una esperanza de verte cambiar,
De escucharte a viva vos amar,
Viendo en las calles otros espejos
En los que contigo nunca me he visto reflejar
Con tantos sentimientos que me sacan lagrimas sin más,
Imaginando un día en tus brazos
Al menos una vez de mi vida un despertar.
El suplicio de un alma herida
Que no encuentra paz
Que pide a gritos
Un poco de ti,
Pero no lo hiciste,
No lo harás.
Tantos días tristes
Y en tu ausencia mi soledad
Me recuerda que no estuviste para sanar mis heridas
Y para las que vengan no estarás.
Palabras dulces que no he de escuchar,
Abrazos fuertes que no me reconfortarán
Y ese anhelo fuerte que no desfallece
De algún día sentir que me puedes amar,
Pero la conciencia
Va por ahí rondando, tratando de explicar
Y hacer entender a mi razón
Que aunque te ame
Eres…
Una madre que nunca amó,
Una madre que nunca me amó.
A N G E L A
::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::
::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::
Una madre que nunca amó.
********************************
Diste tu vientre a una semilla de amor
Vida, latir, respiración.
Germinó como una flor
Pero no encontró amor.
Se hicieron tus brazos para acunar,
Tu vos para la canción de cuna al anochecer,
Se hizo tu mano para apoyar
Y tu vida para proteger.
Nunca supiste amar
Pero nunca supe porqué
Y aunque la flor no marchitó
En el paso del tiempo
Sufrió, lloró, te buscó, te necesitó,
Aunque diste tu presencia;
Nunca te encontró,
Esa flor fui yo,
Sigo siendo yo...
Han pasado veinticuatro años
De soledad,
De vivir con la necesidad
De un gesto sencillo,
De un regalo fácil de entregar;
Un simple abrazo no te pido más.
Cada día una esperanza de verte cambiar,
De escucharte a viva vos amar,
Viendo en las calles otros espejos
En los que contigo nunca me he visto reflejar
Con tantos sentimientos que me sacan lagrimas sin más,
Imaginando un día en tus brazos
Al menos una vez de mi vida un despertar.
El suplicio de un alma herida
Que no encuentra paz
Que pide a gritos
Un poco de ti,
Pero no lo hiciste,
No lo harás.
Tantos días tristes
Y en tu ausencia mi soledad
Me recuerda que no estuviste para sanar mis heridas
Y para las que vengan no estarás.
Palabras dulces que no he de escuchar,
Abrazos fuertes que no me reconfortarán
Y ese anhelo fuerte que no desfallece
De algún día sentir que me puedes amar,
Pero la conciencia
Va por ahí rondando, tratando de explicar
Y hacer entender a mi razón
Que aunque te ame
Eres…
Una madre que nunca amó,
Una madre que nunca me amó.
A N G E L A