Basilio Eduardo ROMERO QU
Nuevo Miembro
A TUS OJOS, MAMÁ . . .
Cuando empezó mi corazón a palpitar
ya el tuyo comenzó a soñar.
Cuando yo aprendí a llorar
tus besos me fueron a consolar.
Cuando mi hambre quise saciar
extendidos tus brazos me fueron a buscar.
Cuando mi boca te quiso llamar
luego tus labios me hicieron hablar.
Cuando mi cuerpo empecé a ensuciar
prontas tus manos no se cansaron de acariciar.
Cuando en la escuela al fin pude estudiar
todos tus sueños echastes a volar.
Cuando grande ya de frente te pueda mirar
a tus ojos, Mamá, jamás los podré olvidar.
ROSARIO, Argentina.
25 Setiembre 1982.
Derechos Reservados. Ç.
Basilio Eduardo ROMERO QUINTEROS.
Cuando empezó mi corazón a palpitar
ya el tuyo comenzó a soñar.
Cuando yo aprendí a llorar
tus besos me fueron a consolar.
Cuando mi hambre quise saciar
extendidos tus brazos me fueron a buscar.
Cuando mi boca te quiso llamar
luego tus labios me hicieron hablar.
Cuando mi cuerpo empecé a ensuciar
prontas tus manos no se cansaron de acariciar.
Cuando en la escuela al fin pude estudiar
todos tus sueños echastes a volar.
Cuando grande ya de frente te pueda mirar
a tus ojos, Mamá, jamás los podré olvidar.
ROSARIO, Argentina.
25 Setiembre 1982.
Derechos Reservados. Ç.
Basilio Eduardo ROMERO QUINTEROS.