franjavsil
Miembro Conocido
Ahora que mis canas y los años rompen el calendario
y los días facturan la aridez del tiempo…
y pesan,
he de decirte que, aun hoy,
el olor de tu cuerpo amanecido sigue siendo
una luna trazada con huellas de mujer.
Te aseguro que, aun hoy,
sigo abordando las calas más agrestes de tus ojos
en los que anidan descalzos los inviernos y los pájaros,
tu risa indisoluble donde abrigo mi llanto,
las tardes de lluvia que salpican de tristeza las aceras,
el cristal quebradizo de mi voz que sigue llamándote
luna amapola, luna sauce, luna arcilla,
luna playa, luna viento…
He de decirte que, aun hoy,
hay hebras de nube creciendo en tu cintura,
que me pierdo en la llovizna de tu ombligo
conjugando en tu piel eternos pentagramas de caricias,
que me peino los sueños con el perfil transparente de tus labios
cuando la noche se reduce a una claridad de luz en tu mirada.
Te aseguro que, aun hoy,
me desangro en tus abrazos
y se pueblan mis dedos de atrevidas metáforas de ternura,
que bebo en los aljibes de tus senos un mar de albores
donde se fragmenta tu nombre mientras te llamo
luna manzana, luna guarida, luna verso,
luna pez, luna batalla…
Y mira que es difícil, aun hoy,
no temblar cuando te miro,
no saber cómo decirte que te quedes a dormir
que ya habrá tiempo mañana de hablar de eclipses y mareas
y de encender estrellas en el contorno intangible de algún beso.
© 2015 He visto a una mujer a solas por mis calles - francisco javier silva
y los días facturan la aridez del tiempo…
y pesan,
he de decirte que, aun hoy,
el olor de tu cuerpo amanecido sigue siendo
una luna trazada con huellas de mujer.
Te aseguro que, aun hoy,
sigo abordando las calas más agrestes de tus ojos
en los que anidan descalzos los inviernos y los pájaros,
tu risa indisoluble donde abrigo mi llanto,
las tardes de lluvia que salpican de tristeza las aceras,
el cristal quebradizo de mi voz que sigue llamándote
luna amapola, luna sauce, luna arcilla,
luna playa, luna viento…
He de decirte que, aun hoy,
hay hebras de nube creciendo en tu cintura,
que me pierdo en la llovizna de tu ombligo
conjugando en tu piel eternos pentagramas de caricias,
que me peino los sueños con el perfil transparente de tus labios
cuando la noche se reduce a una claridad de luz en tu mirada.
Te aseguro que, aun hoy,
me desangro en tus abrazos
y se pueblan mis dedos de atrevidas metáforas de ternura,
que bebo en los aljibes de tus senos un mar de albores
donde se fragmenta tu nombre mientras te llamo
luna manzana, luna guarida, luna verso,
luna pez, luna batalla…
Y mira que es difícil, aun hoy,
no temblar cuando te miro,
no saber cómo decirte que te quedes a dormir
que ya habrá tiempo mañana de hablar de eclipses y mareas
y de encender estrellas en el contorno intangible de algún beso.
© 2015 He visto a una mujer a solas por mis calles - francisco javier silva
Adjuntos
Última edición por un moderador:
