Azalea Diaz
Miembro Conocido
En el surco del sendero
de aquellas noches malditas,
los niños miran al cielo
y sin voz sus ojos gritan.
Un sollozo lastimero
que se cuela entre la brisa,
entre madejas de miedo
entre enjambres, ¡ni respiran!
Unas bombas les cayeron
tan cerca de sus casitas,
un carro bomba en Alepo,
¡Siria, parece el Guernica!
los niños no lo entendieron:
¡mataron sus perros, chivas!
destrozados en el suelo,
encontraron sus familias,
Padres, amigos y abuelos,
descuartizados, ¡En Siria!
y los que sobrevivieron
tienen hambre, no hay comida.
¿Quién puede luchar contra ellos?
¡son monstruos de la milicia!
con misiles bombarderos
en respuesta de armas químicas.
Un clamor al mundo entero,
¡basta de guerra y codicia!
ellos con solo un pañuelo:
somos los niños de Siria.
Azalea.
de aquellas noches malditas,
los niños miran al cielo
y sin voz sus ojos gritan.
Un sollozo lastimero
que se cuela entre la brisa,
entre madejas de miedo
entre enjambres, ¡ni respiran!
Unas bombas les cayeron
tan cerca de sus casitas,
un carro bomba en Alepo,
¡Siria, parece el Guernica!
los niños no lo entendieron:
¡mataron sus perros, chivas!
destrozados en el suelo,
encontraron sus familias,
Padres, amigos y abuelos,
descuartizados, ¡En Siria!
y los que sobrevivieron
tienen hambre, no hay comida.
¿Quién puede luchar contra ellos?
¡son monstruos de la milicia!
con misiles bombarderos
en respuesta de armas químicas.
Un clamor al mundo entero,
¡basta de guerra y codicia!
ellos con solo un pañuelo:
somos los niños de Siria.
Azalea.
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