Precioso soneto con su buena carga de inostalgia, su tanto de tristeza y su lamento de soledad. ¡Cómo me gustaría contribuir y responder de manera eficaz y efectiva a ese deseo angustioso de tus dos versos de cierre. Ya que no pueda ser de manera real, sea al menos la intención y el deseo, en versos que si la paloma no hubiera equivocado su vuelo, ya deberían estar en tu poder tiempo ha. Pero como la de Alberdi creyó que el mar era el cielo y la noche la mañana. Gracias por tu precioso y dolorido poema. Un beso.
Madrigal