Poeta Errante
Miembro Conocido
Un derroche de amor venció a la timidez,
ambos se abrazaron con tanta ternura,
que la luna se puso celosa al observarlos,
hasta roja se puso y se escondió detrás del sol.
Pasaron de los abrazos a los besos apasionados,
que curaron sus heridas que traían en sus mochilas,
ya gastadas de tanto caminar en esta vida,
hicieron un himno del amor y premiados por los cielos.
Ya no habrá más pastillas para alegrar el corazón,
pues el amor triunfó, único y vencedor,
él tan distinto a ella que las negociaciones
fueron muy graciosas que hasta los ángeles rieron.
Ahora son amantes que le rinden tributo al sentir,
con sus corazones latiendo rápidamente,
jugando al juego más hermoso que conozco,
el amor entre un hombre y una mujer,
así dos almas se encontraron.
Gerardo Augusto Pace Bruno
Derechos reservados del autor 2014
ambos se abrazaron con tanta ternura,
que la luna se puso celosa al observarlos,
hasta roja se puso y se escondió detrás del sol.
Pasaron de los abrazos a los besos apasionados,
que curaron sus heridas que traían en sus mochilas,
ya gastadas de tanto caminar en esta vida,
hicieron un himno del amor y premiados por los cielos.
Ya no habrá más pastillas para alegrar el corazón,
pues el amor triunfó, único y vencedor,
él tan distinto a ella que las negociaciones
fueron muy graciosas que hasta los ángeles rieron.
Ahora son amantes que le rinden tributo al sentir,
con sus corazones latiendo rápidamente,
jugando al juego más hermoso que conozco,
el amor entre un hombre y una mujer,
así dos almas se encontraron.
Gerardo Augusto Pace Bruno
Derechos reservados del autor 2014