JAVIER TOMAS
Sub Administrador
Te conocí suspirando de amores
igual que las delicadas flores
que ahogan las penas en mi jardín.
Allí me perdí en tu fragancia,
en esa sublime elegancia
que me elevó hasta el confín.
Y soñé en ser tu amante
en ser la capa y el sombrero
que vista tu esperanza de diamante
robando una sonrisa radiante
que me colme de felicidad.
Pero la espina del rosal
me sacó del encantamiento
que no hay princesa sin cuento
ni sueño sin realidad,
y apareció tu apuesto amante
ahogando, en un solo instante,
la ilusión de este farsante
que soñó con el corazón.
igual que las delicadas flores
que ahogan las penas en mi jardín.
Allí me perdí en tu fragancia,
en esa sublime elegancia
que me elevó hasta el confín.
Y soñé en ser tu amante
en ser la capa y el sombrero
que vista tu esperanza de diamante
robando una sonrisa radiante
que me colme de felicidad.
Pero la espina del rosal
me sacó del encantamiento
que no hay princesa sin cuento
ni sueño sin realidad,
y apareció tu apuesto amante
ahogando, en un solo instante,
la ilusión de este farsante
que soñó con el corazón.