Araciel Abaddon
Miembro Conocido
Sobre la noche oscura,
una pareja deambula,
después de un paseo
con dudas, con fina
capa de lluvia mojando
las telas y arrugas.
Discutiendo los novios
están, pues el prisa
tiene, de mojar.
Ella se niega sin dudar,
pues sí quiere pasión,
que se case y en paz.
acercose la pareja
a la casa de ella sin,
dudar, pues ella
huye de el y ya está
pues la calentura sube,
la fiebre que afecta
su voluntad.
Apoyado está, el novio
sobre el portal, su mano
en el marco de la entrada,
descansa con fuerza y
dispuesto, como sea,
a mojar con su novia
si esta se deja sín
bacilar.
Pero ella no quiere
dejarse llevar, pues
pura quiere ser hasta
el altar.
El nervioso y fogoso
está, y le pide una
felación aunque sea
por caridad.
Pero en ese momento
una luz ciega a los
novios y la pasión
desaparece, en un
instante, de calor
fogosa, enfriada con
una jarra de agua,
inesperada sobre tal
caldera de inocentes.
La luz del portal encendida
está, y un enfadado y
contrariado hombre, de
avanzada edad, sale del
portal, y exclama a los
cuatro vientos su malestar.
¡¿PAPA?! exclama la
novia asustada, ¡SEÑOR!,
dice el novio.
El padre de la novia muy
enojado, le dice a su hija
con decisión y mucha
voluntad:
¡¡HAZLE LO QUE SEA
AL CABRÓN ESTE DE
TU NOVIO, PERO QUE
QUITE SU MANO QUE APOYADA
EN LOS TIMBRES, QUE ESTÁ
DESPERTANDO A TODO
EL VECINDARIO, QUE
POCO LES IMPORTA
VUESTRO DIARIO!!
Araciel Abaddon.
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del Autor de la obra.
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