Luis Underground
Moderador de Versos a Media Luz
En un viernes 13
Aquellas salpicaduras rojizas
en las viejas paredes del sótano
me recuerdan al trágico viernes trece,
y me traen a la mente tus pecados…
…un iluso que la quiso demasiado
por lo cual tuvo que empeñarlo todo
para la hembra que quería el mundo
bajo sus pies y su mando.
Solo que Malena hacia lo que le venía en gana,
y tuvo a más de un hombre entre sus brazos;
hasta que una noche el furor le abrió los ojos,
y sació la sed del brutal alter ego suyo.
Sabes que prescindo de cualquier cosa
menos de la fidelidad ni del corazón enamorado,
menos de la música ni de mi bipolar musa,
la que me llevó a silenciarla en el acto.
El no poder cumplir con nuestra parte del trato
a de hacernos parar en el infierno
como unas tristes bestias sin alma, y yo
de no haber sido alguien más me hubiera suicidado.
Dentro de mi cabeza se oyen martillazos,
y chillidos entrecortados que piden auxilio.
imágenes de extremidades cercenados,
sobre todo un silencio acompañado por los susurros del viento.
Ahora la culpa pesa sobre mis hombros
por la mujer desaparecida que enlutó toda una villa,
por todo lo que ame aunque nadie me haya hecho justicia,
y por sus anómalas presencias cuando estoy a solas…
Chosica, Lima - Perú
Aquellas salpicaduras rojizas
en las viejas paredes del sótano
me recuerdan al trágico viernes trece,
y me traen a la mente tus pecados…
…un iluso que la quiso demasiado
por lo cual tuvo que empeñarlo todo
para la hembra que quería el mundo
bajo sus pies y su mando.
Solo que Malena hacia lo que le venía en gana,
y tuvo a más de un hombre entre sus brazos;
hasta que una noche el furor le abrió los ojos,
y sació la sed del brutal alter ego suyo.
Sabes que prescindo de cualquier cosa
menos de la fidelidad ni del corazón enamorado,
menos de la música ni de mi bipolar musa,
la que me llevó a silenciarla en el acto.
El no poder cumplir con nuestra parte del trato
a de hacernos parar en el infierno
como unas tristes bestias sin alma, y yo
de no haber sido alguien más me hubiera suicidado.
Dentro de mi cabeza se oyen martillazos,
y chillidos entrecortados que piden auxilio.
imágenes de extremidades cercenados,
sobre todo un silencio acompañado por los susurros del viento.
Ahora la culpa pesa sobre mis hombros
por la mujer desaparecida que enlutó toda una villa,
por todo lo que ame aunque nadie me haya hecho justicia,
y por sus anómalas presencias cuando estoy a solas…
Chosica, Lima - Perú
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