Víctor
Moderador de Poesía Jocosa
Yo soy un hombre sincero
de donde crece la palma,
y antes de morirme quiero
echar mis versos del alma.
* * *
Aquí van datos, paisanos,
de mi parcial biografía,
esperando que algún día,
estrechemos nuestras manos.
Mis propósitos son sanos,
y platicártelos quiero,
porque así lo considero
en los versos que te digo,
pues debes saber amigo,
Yo soy un hombre sincero.
Vine al mundo un mes de abril
en un pueblo costanero
del estado de Guerrero,
lugar hermoso y febril.
Con mi palabra gentil
te digo con toda el alma,
expresándome con calma
y con gesto sonriente,
que provengo de ese ambiente,
de donde crece la palma.
Lugar en donde las olas
en las playas se deslizan
y al mirarlas se divisan,
como gigantes corolas;
de ese mar que hace cabriolas
en su líquido venero,
con el tumbo pregonero
bajo el cielo meridiano;
por eso verlo cercano,
antes de morirme quiero.
La amistad es mi divisa,
y disfruto plenamente,
donde se junta la gente
alegremente, sin prisa.
Me gusta ver la sonrisa
porque a mis penas ensalma,
también sentir que se empalma
la inspiración en mi pecho,
y bajo un frondoso techo
echar mis versos del alma.
de donde crece la palma,
y antes de morirme quiero
echar mis versos del alma.
* * *
Aquí van datos, paisanos,
de mi parcial biografía,
esperando que algún día,
estrechemos nuestras manos.
Mis propósitos son sanos,
y platicártelos quiero,
porque así lo considero
en los versos que te digo,
pues debes saber amigo,
Yo soy un hombre sincero.
Vine al mundo un mes de abril
en un pueblo costanero
del estado de Guerrero,
lugar hermoso y febril.
Con mi palabra gentil
te digo con toda el alma,
expresándome con calma
y con gesto sonriente,
que provengo de ese ambiente,
de donde crece la palma.
Lugar en donde las olas
en las playas se deslizan
y al mirarlas se divisan,
como gigantes corolas;
de ese mar que hace cabriolas
en su líquido venero,
con el tumbo pregonero
bajo el cielo meridiano;
por eso verlo cercano,
antes de morirme quiero.
La amistad es mi divisa,
y disfruto plenamente,
donde se junta la gente
alegremente, sin prisa.
Me gusta ver la sonrisa
porque a mis penas ensalma,
también sentir que se empalma
la inspiración en mi pecho,
y bajo un frondoso techo
echar mis versos del alma.
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