Luis Underground
Moderador de Versos a Media Luz
Hasta cuando…
Y el temor de salir se hace cada vez mayor, sobre todo en las noches cuando las calles las oscuras reflejan un claro abandono de la seguridad vecinal y de los policías, y que parece que se les trago la tierra.
Los constantes asaltos a mano armada hacia los estudiantes me ponen cada vez más los pelos de punta, incluso han sido baleados por robarles un celular, y hasta algunos han perdido la vida. ¿en qué mundo estamos?
Pero no solo en los barrios de mayor riesgo, sino también dentro de tu propio negocio: un restaurante, cabinas de internet, locales comerciales y hasta simples bodegas, a los mismos cambistas de dinero. Lo peor de todo es que pueden robarte hasta en tu propia casa cuando creen que estás dormido. Y estos desmanes no tienen cuando acabar y sobre todo por culpa en mayor parte por estos representantes de la ley, que no están bien capacitados y por tal se lavan las manos y sueltan a estos criminales en cuestión de unas pocas horas. La jodida misma ley atrasada los protege. Pero ¿acaso no habían pruebas? O ¿acaso es porque son parientes de algún capitán o político? O es porque reciben algún dinerito por lo bajo? Hasta cuando señores, hasta cuando…
Sea lo que sea, pero con tanta burocracia y corrupción, “la justicia tarda pero llega”. La justicia cuesta y mucho pero el que tiene plata le saca tanto el jugo, que se vuelve solo una palabra, y una palabra sin sentido. Mientras tanto el abuso de poder, la corrupción y la inseguridad seguirán oprimiendo y operando en las calles limeñas, y que ciertamente algunos ignoran. Una ciudad que está atascada por el trafico en hora puntas, el comercio ambulatorio que es mal visto por las gentes de arriba, y la informal venta de celulares robados en las narices de los propios agentes que dicen que “sirven y protegen”. Pero que no hacen más que manchar la alicaída PNP. He dicho.
Y el temor de salir se hace cada vez mayor, sobre todo en las noches cuando las calles las oscuras reflejan un claro abandono de la seguridad vecinal y de los policías, y que parece que se les trago la tierra.
Los constantes asaltos a mano armada hacia los estudiantes me ponen cada vez más los pelos de punta, incluso han sido baleados por robarles un celular, y hasta algunos han perdido la vida. ¿en qué mundo estamos?
Pero no solo en los barrios de mayor riesgo, sino también dentro de tu propio negocio: un restaurante, cabinas de internet, locales comerciales y hasta simples bodegas, a los mismos cambistas de dinero. Lo peor de todo es que pueden robarte hasta en tu propia casa cuando creen que estás dormido. Y estos desmanes no tienen cuando acabar y sobre todo por culpa en mayor parte por estos representantes de la ley, que no están bien capacitados y por tal se lavan las manos y sueltan a estos criminales en cuestión de unas pocas horas. La jodida misma ley atrasada los protege. Pero ¿acaso no habían pruebas? O ¿acaso es porque son parientes de algún capitán o político? O es porque reciben algún dinerito por lo bajo? Hasta cuando señores, hasta cuando…
Sea lo que sea, pero con tanta burocracia y corrupción, “la justicia tarda pero llega”. La justicia cuesta y mucho pero el que tiene plata le saca tanto el jugo, que se vuelve solo una palabra, y una palabra sin sentido. Mientras tanto el abuso de poder, la corrupción y la inseguridad seguirán oprimiendo y operando en las calles limeñas, y que ciertamente algunos ignoran. Una ciudad que está atascada por el trafico en hora puntas, el comercio ambulatorio que es mal visto por las gentes de arriba, y la informal venta de celulares robados en las narices de los propios agentes que dicen que “sirven y protegen”. Pero que no hacen más que manchar la alicaída PNP. He dicho.
