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MADRE (décima)

¡Dios Santísimo me ha enviado!
un amor que no se apaga,
que fue nutriendo y halaga
mi cuerpo con gran cuidado.
¡Dios mío! me has regalado
una flor y eso es un hecho,
me dio a beber de su pecho
el suave néctar perlino,
y con su sabor divino
yo quedaba satisfecho.

¡Madre! tu nombre es amor,
y te alaban y bendicen
todos los que se organicen
a resaltar tu valor.
Sanadora del dolor,
de desdicha y de desgracia,
¡Madre! llena eres de gracia
porque bendita tu eres
entre todas las mujeres
sin ser de la aristocracia.

Los motivos celestiales,
los amores que te llaman
bien se quedaron y claman
por tus besos terrenales.
Hoy vives los ideales
de tu inquietante martirio,
y como un hermoso lirio
regalas tu fresco olor,
para aliviar el dolor
que se esconde en tu delirio.

Siempre te tendré presente
pues soy tu hijo y tu historia,
y en mi mundo y mi memoria
jamás estarás ausente.
Dándote un beso en la frente
pido a los Santos del Cielo
te ayuden en tu desvelo,
y para aliviar tus penas
sólo le den cosas buenas
a tu nombre en este suelo.


07/05/2014
Ysidro Parra-Venezuela
Reservados Derechos de Autor.
 

SANDRA BLANCO

Administradora - JURADO
¡Dios Santísimo me ha enviado!
un amor que no se apaga,
que fue nutriendo y halaga
mi cuerpo con gran cuidado.
¡Dios mío! me has regalado
una flor y eso es un hecho,
me dio a beber de su pecho
el suave néctar perlino,
y con su sabor divino
yo quedaba satisfecho.

¡Madre! tu nombre es amor,
y te alaban y bendicen
todos los que se organicen
a resaltar tu valor.
Sanadora del dolor,
de desdicha y de desgracia,
¡Madre! llena eres de gracia
porque bendita tu eres
entre todas las mujeres
sin ser de la aristocracia.

Los motivos celestiales,
los amores que te llaman
bien se quedaron y claman
por tus besos terrenales.
Hoy vives los ideales
de tu inquietante martirio,
y como un hermoso lirio
regalas tu fresco olor,
para aliviar el dolor
que se esconde en tu delirio.

Siempre te tendré presente
pues soy tu hijo y tu historia,
y en mi mundo y mi memoria
jamás estarás ausente.
Dándote un beso en la frente
pido a los Santos del Cielo
te ayuden en tu desvelo,
y para aliviar tus penas
sólo le den cosas buenas
a tu nombre en este suelo.


07/05/2014
Ysidro Parra-Venezuela
Reservados Derechos de Autor.

Ysidro que bella poesía en honor de la madre,los versos a las madres siempre son hermosos,es muy hermosa la poesía,gracias por compartir,un beso grande.
 
¡Dios Santísimo me ha enviado!
un amor que no se apaga,
que fue nutriendo y halaga
mi cuerpo con gran cuidado.
¡Dios mío! me has regalado
una flor y eso es un hecho,
me dio a beber de su pecho
el suave néctar perlino,
y con su sabor divino
yo quedaba satisfecho.

¡Madre! tu nombre es amor,
y te alaban y bendicen
todos los que se organicen
a resaltar tu valor.
Sanadora del dolor,
de desdicha y de desgracia,
¡Madre! llena eres de gracia
porque bendita tu eres
entre todas las mujeres
sin ser de la aristocracia.

Los motivos celestiales,
los amores que te llaman
bien se quedaron y claman
por tus besos terrenales.
Hoy vives los ideales
de tu inquietante martirio,
y como un hermoso lirio
regalas tu fresco olor,
para aliviar el dolor
que se esconde en tu delirio.

Siempre te tendré presente
pues soy tu hijo y tu historia,
y en mi mundo y mi memoria
jamás estarás ausente.
Dándote un beso en la frente
pido a los Santos del Cielo
te ayuden en tu desvelo,
y para aliviar tus penas
sólo le den cosas buenas
a tu nombre en este suelo.


07/05/2014
Ysidro Parra-Venezuela
Reservados Derechos de Autor.
Ysidro que se puede decir a tus versos, que me enorgullese el alma que un hijo dedique su don en este caso poesia, para dar un merecido regalo a quien lacto de amor sus dias. Un abrazo y tus bendiciones lleguen a tu preciosa madre.
 

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