María del Mar Ponce López
Moderadora de Prosas Compartiendo Tristezas
Mariposas en el alma (décimas reales)
Necesito guardar mi humilde esencia,
mi sencillez, mis sueños, mi esperanza,
mantener la ilusión y la templanza
en un mundo carente de conciencia.
No quiero que me falte la presencia
del sabor de una piel de caramelo,
pues nadar en utópico consuelo
es vivir por vivir, librar la muerte.
De los espejos negros de mi suerte
solo quedan cristales por el suelo.
Necesito la historia más remota,
aquella que quedó tras las paredes
de un canto sin canción. Sobre mis redes
prisionera, recibo mi derrota.
Entre versos descubro que lo idiota
es perder lo que soy cuando respiro,
puede ser la razón por la que miro
aquello que resbala por mis manos,
aquello que nos hace casi humanos
me duele, me destruye si suspiro.
Necesito que sane cada herida,
que mi sangre no manche mi armadura,
guardar como un tesoro la ternura
y encontrar el sendero de mi vida.
No quiero ser gaviota malherida
buscando en la tormenta inútil calma,
lucho por encontrar consuelo y salma
rozando levemente el infinito,
porque llevo en mi cuerpo un verso escrito
y tengo mariposas en el alma.
María del Mar Ponce López
Reservados todos los derechos de autor
Necesito guardar mi humilde esencia,
mi sencillez, mis sueños, mi esperanza,
mantener la ilusión y la templanza
en un mundo carente de conciencia.
No quiero que me falte la presencia
del sabor de una piel de caramelo,
pues nadar en utópico consuelo
es vivir por vivir, librar la muerte.
De los espejos negros de mi suerte
solo quedan cristales por el suelo.
Necesito la historia más remota,
aquella que quedó tras las paredes
de un canto sin canción. Sobre mis redes
prisionera, recibo mi derrota.
Entre versos descubro que lo idiota
es perder lo que soy cuando respiro,
puede ser la razón por la que miro
aquello que resbala por mis manos,
aquello que nos hace casi humanos
me duele, me destruye si suspiro.
Necesito que sane cada herida,
que mi sangre no manche mi armadura,
guardar como un tesoro la ternura
y encontrar el sendero de mi vida.
No quiero ser gaviota malherida
buscando en la tormenta inútil calma,
lucho por encontrar consuelo y salma
rozando levemente el infinito,
porque llevo en mi cuerpo un verso escrito
y tengo mariposas en el alma.
María del Mar Ponce López
Reservados todos los derechos de autor