La verdadera revolución empieza en uno mismo
y no tiene fronteras.
El verdadero motor es la alegría
y no la indignación.
El verdadero logro es el amor
y no la justicia.
Meditación, meditación, meditación.
Al ver la situación actual en el mundo, a veces nos falla el "motor de la alegría", pero hay que ir a por él y ponerlo en funcionamento. Gracias por compartir.
La verdadera revolución empieza en uno mismo
y no tiene fronteras.
El verdadero motor es la alegría
y no la indignación.
El verdadero logro es el amor
y no la justicia.
Meditación, meditación, meditación.
Versos muy motivacionales, con un tinte de filosofía individualista y social; meditar antes de actuar y mejor aún antes de hablar, para muchos que no analizan las variables y consecuencias de sus actos funestos, saludos, bienvenido a versos compartidos, que pases bien y chispas estelares a tu pluma---
Siempre es bueno meditar todo acontecimiento que nos involucra o no, pero se tiene que hacer de corazón con amor y justicia, de nada sirve apartar la justicia a un lado, porque el mismo amor, contiene sus reglas internas y sus principios. Un placer leerlo Renidesco, saludos.
Pensar las cosas dos veces antes de actual, es tal vez lo que dbemos hacer, en un mundo donde la indignación globalizada es el aire que respiramos, y de lo demás que que andamos faltos.