Olimpia Era
Miembro Conocido
MOMENTOS TENSOS
En este lugar aséptico,
donde todo es blanco y azul cielo,
nos sentimos seguros y con anhelo
de que termine este capítulo patético.
Cuando empiezan a apagar
las luces, se queda un piloto,
que parece que las sombras vayan a vagar
y el pasillo es un estanque con lotos
Todo es ilusión de nuestra mente cansada,
de nuestro miedo disimulado,
parece que el alma esté agazapada
y con frases animosas lo hemos anulado.
Hay sol, no hay sombras,
desde hace horas, hay movimiento,
van llegando los hijos y te asombras
todo va a ir bien y será un momento.
Fuera quedamos los tres
con caras de circunstancias.
Tengo miedo, ¿si algo no va bien?
¿cómo viviré con él en la distancia?.
No es que no sepa vivir,
pero le echaría de menos,
son muchos años: sufrir,
alegrías, fiestas, discusiones cuando comemos.
Eso no va a pasar.
No puede pasarle a él,
pues su corazón no se va a parar
y volverá a hacer de las suyas.
Eres más de una vida,
la que llevamos juntos,
a mí me ha parecido viaje de ida
y que ha durado minutos.
Aquí te estoy esperando,
angustiada como madre,
angustiada como pareja, preparando
y con las emociones en un odre.
A él le he prometido,
que si en esta fallece,
compraré una botella de cava
y con unos langostinos, beberé a su salud. Toda la botella.
Olimpia Era
En este lugar aséptico,
donde todo es blanco y azul cielo,
nos sentimos seguros y con anhelo
de que termine este capítulo patético.
Cuando empiezan a apagar
las luces, se queda un piloto,
que parece que las sombras vayan a vagar
y el pasillo es un estanque con lotos
Todo es ilusión de nuestra mente cansada,
de nuestro miedo disimulado,
parece que el alma esté agazapada
y con frases animosas lo hemos anulado.
Hay sol, no hay sombras,
desde hace horas, hay movimiento,
van llegando los hijos y te asombras
todo va a ir bien y será un momento.
Fuera quedamos los tres
con caras de circunstancias.
Tengo miedo, ¿si algo no va bien?
¿cómo viviré con él en la distancia?.
No es que no sepa vivir,
pero le echaría de menos,
son muchos años: sufrir,
alegrías, fiestas, discusiones cuando comemos.
Eso no va a pasar.
No puede pasarle a él,
pues su corazón no se va a parar
y volverá a hacer de las suyas.
Eres más de una vida,
la que llevamos juntos,
a mí me ha parecido viaje de ida
y que ha durado minutos.
Aquí te estoy esperando,
angustiada como madre,
angustiada como pareja, preparando
y con las emociones en un odre.
A él le he prometido,
que si en esta fallece,
compraré una botella de cava
y con unos langostinos, beberé a su salud. Toda la botella.
Olimpia Era