Amalia Lateano
Miembro Conocido
No traías canciones... Partiste de la guerra
con un poco de ropa de aquella buena tierra.
Con solo tus trece años, el llanto desaferra
el muelle del olvido que por la soga entierra.
El barco entre las aguas con sus sueños se unían
en tan azules ojos genoveses irían,
a una tierra lejana con dolor partirían
dejando atrás la mama, por metrallas que herían...
Hablaste con ensueño de tu Patria lejana.
Se despertó en mi pecho tal deseo que afana
la tarea de siempre, porque no será vana...
"No podrás" lo pensaste con tu mente mundana...
Caminé por las calles en tu viejo villorio.
Por explorar los huecos de este monte ilusorio.
Acorde que resuena profundo y meritorio
entre tus " canzonetas", tan vasto repertorio.
Han brotado sarmientos: las hojas y los frutos.
Está la buena cepa. Son frutos diminutos.
Guardan en sus entrañas todos los atributos.
Aquellos que añorabas, los llevaré sin lutos.-
con un poco de ropa de aquella buena tierra.
Con solo tus trece años, el llanto desaferra
el muelle del olvido que por la soga entierra.
El barco entre las aguas con sus sueños se unían
en tan azules ojos genoveses irían,
a una tierra lejana con dolor partirían
dejando atrás la mama, por metrallas que herían...
Hablaste con ensueño de tu Patria lejana.
Se despertó en mi pecho tal deseo que afana
la tarea de siempre, porque no será vana...
"No podrás" lo pensaste con tu mente mundana...
Caminé por las calles en tu viejo villorio.
Por explorar los huecos de este monte ilusorio.
Acorde que resuena profundo y meritorio
entre tus " canzonetas", tan vasto repertorio.
Han brotado sarmientos: las hojas y los frutos.
Está la buena cepa. Son frutos diminutos.
Guardan en sus entrañas todos los atributos.
Aquellos que añorabas, los llevaré sin lutos.-
