ADMINISTRACIÓN
Administrador
Poema 3
La niña y la araña
Cada día, cada día,
ella pone su sillita,
hecha de madera y mimbre,
en el mismo rinconcito
de su pequeño jardín.
Cada día, cada día,
ella visita a una amiguita
que allí teje, paciente,
su fina y suave tela.
Cada día, cada día,
la niña y la araña
allí se encuentran
en el rincón del jardín.
Cada día, cada día,
la niña le cuenta sus cosas
mientras la arañita
teje y teje sin parar.
Cada día, cada día,
la niña le vuelve a recordar:
"nuestra amistad es un secreto,
no sea que alguien te venga a matar".
Cada día, cada día,
la niña y su amiga araña
miran el mundo desde el mismo lugar:
un rinconcito escondido
en el jardín de su hogar.
La niña y la araña
Cada día, cada día,
ella pone su sillita,
hecha de madera y mimbre,
en el mismo rinconcito
de su pequeño jardín.
Cada día, cada día,
ella visita a una amiguita
que allí teje, paciente,
su fina y suave tela.
Cada día, cada día,
la niña y la araña
allí se encuentran
en el rincón del jardín.
Cada día, cada día,
la niña le cuenta sus cosas
mientras la arañita
teje y teje sin parar.
Cada día, cada día,
la niña le vuelve a recordar:
"nuestra amistad es un secreto,
no sea que alguien te venga a matar".
Cada día, cada día,
la niña y su amiga araña
miran el mundo desde el mismo lugar:
un rinconcito escondido
en el jardín de su hogar.
Última edición: