Puntuales intervenciones
Quiero encontrarme contigo
no importa si es sin saberlo,
a mitad de la nada o un sueño,
en el inicio de todos los inicios,
cuando el mundo no se tenga pensado,
cuando el día acueste a la noche
a un lado de tu pelo enmarañado.
Quiero encontrarme contigo,
con mi sangre atemporal
y mi hálito milenario,
vestido con párpados de griego
o en el trono del imperio Otomano,
ungido en las aguas del Ganges
cuando en la hoguera tiemblen
mis artilugios planetarios.
Quiero encontrarme contigo
en todas tus pretéritas y futuras
formas recurrentes,
darme cuenta de haber renacido,
en el instante previo del beso,
en el acontecer preciso,
la obertura que da paso
al resplandor infinito,
donde vuelvas a vestir de carne
tu perfecto y sublime talle,
en ese momento de lucidez
cuando cada pieza ensamble,
saber quién eres y quien has sido
y en tus puntuales intervenciones
quiero encontrarme contigo
para solventar el problema
no de haberte conocido,
sino en eones de vidas
acabar cada quien en otro sitio.
FLL
Quiero encontrarme contigo
no importa si es sin saberlo,
a mitad de la nada o un sueño,
en el inicio de todos los inicios,
cuando el mundo no se tenga pensado,
cuando el día acueste a la noche
a un lado de tu pelo enmarañado.
Quiero encontrarme contigo,
con mi sangre atemporal
y mi hálito milenario,
vestido con párpados de griego
o en el trono del imperio Otomano,
ungido en las aguas del Ganges
cuando en la hoguera tiemblen
mis artilugios planetarios.
Quiero encontrarme contigo
en todas tus pretéritas y futuras
formas recurrentes,
darme cuenta de haber renacido,
en el instante previo del beso,
en el acontecer preciso,
la obertura que da paso
al resplandor infinito,
donde vuelvas a vestir de carne
tu perfecto y sublime talle,
en ese momento de lucidez
cuando cada pieza ensamble,
saber quién eres y quien has sido
y en tus puntuales intervenciones
quiero encontrarme contigo
para solventar el problema
no de haberte conocido,
sino en eones de vidas
acabar cada quien en otro sitio.
FLL