Antonio Jurado Rivera
Miembro Conocido
De cómo la ilusión y los deseos hacen realidad un sueño.
La niña estaba jugando
y hacía el ruido de un motor
un maravilloso día
que inundada de ilusión
quiso volar como un ave
mirando a su alrededor
soñando que podría hacerlo
igual que lo hace un avión.
Había tenido una idea
se le ocurrió a la chiquilla
a emprender como los pájaros
un vuelo de maravillas.
Que con solo alzar los brazos
podría subir hasta el cielo
para entrar al paraíso
a visitar a su abuelo.
Que una tarde de verano
porque estaba muy mayor
lo llamó Dios a su lado
y ella no se despidió.
San Pedro estaba sentado
junto a la puerta del cielo
y la niña le preguntó
si él conocía a su abuelo.
El santo dijo que sí
que le avisaba deprisa
porque se pondría contento
cuando él la viera allí.
Enseguida salió el abuelo
se abrazaron con ternura
y la niña llena de pena
lloraba con amargura.
Y él le agradeció a su nieta
que ella viniera enseguida
porque al tenerla a su lado
y verla tan decidida
parecía sentir de nuevo
el renacer a la vida.
Se abrazaron con cariño
en una amorosa unión
y para siempre a su abuelo
lo llevó en su corazón.
Antonio Jurado - España
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