Alba Rivero.
Miembro Conocido
Por el sendero del bosque
va correteando una ardilla.
Los pájaros la saludan,
las flores le dan sonrisas.
Lleva un sombrero de paja
adornado con puntillas
y corre, corre que corre…
parece que va con prisa.
De repente se detiene
al pie de un árbol añoso,
se quita su sombrerito
y le dice muy cumplida:
- Buenos días, señor Árbol
estoy buscando comida.
-¿Estás buscando bellotas
para tu glotonería?
- Señor Árbol, no sea injusto
que no es glotonería,
he caminado un gran trecho
me siento desfallecida.
-Já , já, ja, ja
no te enojes
graciosa y gentil ardilla.
Más, no lastimes mis ramas
que añosas ya, están heridas.
-Pero entonces,¿ cómo haremos?
necesito tu comida.
-Espera, déjame un poco,
sé conmigo más paciente…
Si vieras pasar al viento
dile que sople mi frente.
-Señor Árbol, muchas gracias.
Diré al viento que es urgente.
( Corrióse rápida al viento
y dijo sin detenerse)
Señor Viento, ¿usted podría
soplar del árbol la frente
para que caigan sus frutos
y así pudiera comerles?
Soplóle el viento amistoso
en el rostro y en la frente.
Ni un fruto quedó prendido
en sus ramas, sin caerse.
Feliz estaba la ardilla,
contento el árbol añejo.
-Ya ves, aunque soy anciano,
¡todavía no estoy viejo!
Alba Rivero