Víctor
Moderador de Poesía Jocosa
Mi novia me regaló
un breve rompecabezas
de tan solo cinco letras,
como prueba de su amor.
Eran la M, la A,
la E , la T y la O,
de modo que al colocar
de inmediato viera yo
un TE AMO, sin dudar.
Pero al armar esas letras
con apremiante deseo,
pregunté a mi novia Petra
que quién era el tal MATEO.